No hay descanso para los cubanos, que este domingo vuelven a tener un pronóstico de apagones que rozan los 900 MW, y que podrían ser superiores teniendo en cuenta la tendencia en las estimaciones de la Unión Eléctrica de Cuba (UNE).
“Se estima para la hora pico una disponibilidad de 2,410 MW y una demanda máxima de 3,200 MW, para un déficit de 790 MW, por lo que de mantenerse las condiciones previstas se pronostica una afectación de 860 MW en el horario pico”, indicó la UNE en su nota informativa de este domingo.
El sistema electroenergético nacional (SEN) sigue al borde del colapso total y los cubanos ven pasar los días incorporando los apagones como parte de una “normalidad” marcada por rutinas que generan un creciente malestar.
A la escasez de alimentos, los bajos salarios, la pobreza en aumento, la proliferación de basureros en las calles, las largas colas, el hundimiento de los servicios públicos, la falta de medicamentos y transporte, las escuelas y hospitales en ruinas, se añade el ingrediente más molesto para los cubanos: los apagones.
“En el día de ayer se afectó el servicio por déficit de capacidad de generación las 24 horas del día y no se ha podido restablecer el servicio durante la madrugada de hoy”, dijo la UNE este domingo, mientras el gobierno de la “continuidad” de Miguel Díaz-Canel deja cada día que pasa una muestra más de su incapacidad para resolver la grave crisis que golpea a los cubanos.
Para mayor irritación, el parte de la empresa estatal incorpora este domingo una nueva unidad termoeléctrica a la lista de averiadas. Si la víspera se encontraban en el fatídico listado la unidad 2 de la CTE Felton y las unidades 5, 6 de la CTE Rente, ahora se suma la unidad 8 de la termoeléctrica Máximo Gómez del Mariel.
El detalle curioso del día lo puso el hecho de que la Nota Informativa apareciese publicada primero en las redes sociales del periodista oficialista José Miguel Solís, y no en las redes de la UNE, donde se publica a diario.
Lastrada por los comentarios negativos que recibe en sus redes sociales, la empresa estatal que dirige Alfredo López Valdés quizás prefirió “controlar daños” y ofrecer la información a través de terceros. No obstante, los internautas cubanos dejaron saber su opinión en las redes de Solís.
“Me da hasta pena leer este parte todos los días. Nos van a parar [el corazón] de tanto estrés. No se puede ni cocinar, ni prácticamente dormir. ¿Quién puede rendir en una escuela, en un hospital, o en un policlínico? Y ni hablar de los niños pequeños”, dijo una usuaria de Facebook.
"¡Bárbaro! Y por supuesto, este déficit lo pagamos las mismas provincias y los mismos circuitos, que somos los esclavos del apagón para que la capital de todos los cubanos pueda disfrutar tranquila. Y en caso de fuerza mayor, dos o cuatro horitas para ser solidarios. Mientras, nosotros llegamos a las 15 o 20 horas si es necesario. Gran lección de igualdad", protestó otro.
"Entre el calor, la basura que no recogen, los apagones y la inflación que no para... Todo junto, dan deseos de vomitar", dijo otro enfermo de tantas calamidades.
"Definitivamente los dirigentes de este país no tienen idea de lo que está pasando el pueblo, de lo que es pasarse una noche entera sin corriente y luego un día entero. Ellos en sus oficinas, carros y casas climatizadas pueden pedir resistencia. Ahora, no hay más culpables que nosotros mismos, que hemos permitido que nos pisoteen como les da la gana, mientras sus familias viven a todo dar", concluyó otra cubana harta de la situación.
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