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Después de un fin de semana negro en Cuba, con apagones por déficit de más de 1000 MW tanto el sábado como el domingo, la semana no podía comenzar con peor augurio.
Para este lunes, la Unión Eléctrica (UNE) pronostica cortes de electricidad durante todo el día, con afectaciones de 211 MW para la mañana, 550 MW en el mediodía y 950 MW en la hora pico.
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Pero lo más probable es que las cifras se queden por debajo.
Así sucedió el fin de semana. El domingo se estimaba una afectación de 880 MW y la cifra final fue de 1033 MW, y el sábado los 800 MW previstos llegaron a 1043 MW.
En ambos días se afectó el servicio por déficit de capacidad de generación durante las 24 horas.
En este momento, se encuentran en averías cuatro unidades de las termoeléctricas Mariel, Nuevitas, Felton y Renté. Otro bloque de la CTE Santa Cruz está en mantenimiento.
Además, 42 centrales de generación distribuida están fuera de servicio por falta de combustible (316 MW afectados) y las limitaciones en la generación térmica son de 476 MW.
Evolución de los apagones durante el mes de Septiembre:
Resumen de apagones de la última semana:
El 16 de septiembre de 2024, Cuba comenzó la semana con un déficit energético cercano a los 1,000 MW, lo que resultó en apagones prolongados debido a la inactividad de termoeléctricas y generadoras distribuidas. El 18 de septiembre, la situación se agravó cuando la demanda superó los 3,200 MW y solo se suministró el 41.75%, lo que generó cortes eléctricos de hasta 16 horas. Provincias como Cienfuegos y Camagüey se vieron gravemente afectadas, con apagones que duraron entre 6 y 14 horas. La situación fue particularmente crítica el 19 de septiembre, cuando un apagón en el Hospital Municipal de Vertientes en Camagüey puso en riesgo la vida de pacientes críticos.
El 20 de septiembre, los apagones persistieron, afectando gravemente a provincias como Camagüey y Villa Clara, donde los cortes alcanzaron hasta 14 horas. La crisis se intensificó el 22 de septiembre, cuando la Empresa Eléctrica de La Habana anunció un aumento en los horarios de apagones en la capital, que alcanzarían hasta 20 horas semanales. En medio de esta situación, un cartel en Bayamo causó indignación entre los cubanos, reflejando el descontento generalizado ante la falta de soluciones a la crisis eléctrica, mientras el gobierno intentaba calmar los ánimos con declaraciones como las del primer ministro Manuel Marrero.
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