La creciente violencia en México obligó al retiro de médicos cubanos que atendían a la población de El Palmito, en Concordia, Sinaloa, informó la prensa local.
El secretario de Salud del estado, Cuitláhuac González Galindo, confirmó que, debido a las condiciones de inseguridad en la zona, la embajada de Cuba solicitó que los galenos salieran del estado, informó la prensa local.
Inicialmente, se había optado por contratar médicos cubanos ante la dificultad de mantener personal médico permanente en esta remota comunidad, donde desde el pasado 9 de septiembre el crimen organizado convirtió a El Palmito en un pueblo fantasma, ya que prácticamente todos sus habitantes dejaron sus casas y se dirigieron hacia otros lugares del estado o a Durango.
Los recientes hechos de violencia hicieron imposible continuar con la atención médica en la región.
González Galindo señaló que estos médicos no están habituados a las situaciones de estrés e inseguridad que caracterizan el entorno actual en Sinaloa.
El funcionario también abordó la situación de otros centros de salud en el estado, mencionando incidentes como el ataque armado en el Hospital del IMSS Bienestar en Villa Unión, donde hombres armados exigieron atención médica para un compañero herido.
Aunque algunos hospitales han enfrentado cierres temporales debido a la inseguridad, se asegura que la mayoría de las unidades de salud permanecen operativas.
La violencia en Sinaloa no solo afecta a la población civil, sino que también pone en riesgo a los profesionales de la salud, quienes, al ser enviados a trabajar en condiciones de peligro, enfrentan un entorno que puede resultar letal.
A principios de septiembre, se reportaban 77 médicos cubanos en Sinaloa, muchos de ellos destinados a áreas rurales, donde los profesionales locales evitan laborar.
En julio pasado, en medio de la aguda crisis de los servicios de salud pública en Cuba, 2,700 médicos dejaron sus puestos en la isla para unirse a otros 1000 profesionales cubanos que prestan asistencia en hospitales de México, según anunció el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Durante su conferencia de prensa matutina diaria, en Palacio Nacional, el presidente mexicano anunció la próxima llegada de los galenos y reiteró su agradecimiento al régimen cubano por el apoyo a los planes de su gobierno de dotar de personal suficiente al sistema público de salud.
Mientras la falta de médicos en los hospitales, policlínicos y consultorios en comunidades y barrios de Cuba, junto a la escasez de medicamentos e insumos, ponen en riesgo la salud de la población cubana, el gobierno de Miguel Díaz-Canel acrecienta la exportación de fuerza médica calificada a México y otros países, muchos de ellos violentos donde los médicos cubanos corren peligro.
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