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El joven cubano Dayan Sotolongo, quien padece elefantiasis en ambas piernas, suplica ayuda para poder viajar a España a operarse.
Dayan envió un mensaje a la activista Diasniurka Salcedo Verdecia para viabilizar su caso. Al chico le faltan 2,000 dólares para concluir sus trámites y poder salir de Cuba, el resto del dinero ya lo tiene.
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Según le contó, tiene que recaudar el dinero que le falta para su ingreso en el hospital en España.
"Gracias a las personas que me fueron ayudando desde el principio, poco a poco pude hacer lo de mis papás del viaje, y gracias a la doctora y a un amigo que me contactó pude reunir casi todo el dinero de mi operador (SIC)", detalló.
Dayan es un muchacho de 19 años de Pinar del Río que apenas puede caminar y sufre fuertes dolores debido al linfedema en grado cuarto que sufre en las extremidades.
"Estoy muy grave y necesito operarme urgente, el 17 de octubre se me vence la prórroga de mis papeles y no voy a poder ir a operarme y después me puedo quedar inválido", subrayó.
Él compartió su teléfono +5350781272 por si alguien lo quiere llamar y verificar su situación, así como las tarjetas bancarias para quien pueda depositar dinero.
"Ya no puedo ni caminar", recalcó.
En mayo, el humorista Andy Vázquez hizo una directa en sus redes para recaudar dinero para Dayan, a quien los médicos en Cuba le dijeron que no tienen solución alguna para él.
"Él tiene todo ya para viajar a España; un doctor o un hospital ya se hizo cargo y le dijeron que lo va a operar, solo tiene que pagar los pasajes. Son dos huérfanos, no tienen ni papá ni mama, viven solitos. La hermana se ha encargado de ayudar a su hermanito, como es lógico", explicó.
"Lo único que le falta para poder irse a España es el dinero del pasaje. Como ustedes pueden observar sus piernas, él tiene que ir en primer clase porque no cabe en un asiento regular. El pasaje en primera vale 1,700 dólares (promedio) y el de su hermana, 800. Sería un total de 2,500 dólares", detalló Andy.
En febrero, Dayan pidió una visa humanitaria porque en el sistema de salud cubano, al que acudió durante siete años, no le dieron ni siquiera un alivio para su enfermedad. Sin embargo, hay hospitales en Estados Unidos y en España que mostraron disposición a estudiar su caso y darle atención.
El muchacho no tiene un diagnóstico certero y por tanto no recibe tratamiento. Está abandonado a su suerte en un apartamento de un cuarto piso, en Santa Lucía, municipio Minas de Matahambre.
Su madre falleció por un infarto cuando él tenía cinco años y la familia marchó a vivir en Guantánamo un tiempo. Allí comenzó a sufrir los efectos del linfedema, cuando tenía 12 años.
A su compleja situación de salud y a la ausencia de su madre, se sumó el dolor de la muerte de su papá hace un año y medio por problemas en un riñón.
"Nos quedamos huérfanos mi hermana (Dayanis Sotolongo) y yo. Vivimos aquí en Santa Lucía, solos. El gobierno me paga 1,500 pesos por mi chequera de asistencia social. Nunca me han dado nada más", comentó.
Dayan decidió sacar a la luz su caso en las redes sociales para pedir ayuda.
"A partir de que subí el video contando mi historia, vinieron a visitarme personas del Partido Comunista de Cuba y médicos, gente que yo nunca antes conocí. Dijeron que me iban a empezar a ayudar y van pasando los días, pero hasta ahora no he visto nada", dijo entonces.
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