Una cubana denunció el largo tiempo de espera que tuvo que soportar para ser atendida por los servicios funerarios del Estado, mientras en su casa permanecía el cuerpo de una persona fallecida, a la espera de un ataúd.
“Es una falta de respeto y falta de conciencia que tengamos una fallecida desde las 10:10 am en nuestra casa y no haya ataúd. Ya han pasado ocho horas y aún sin ninguna respuesta del personal de la funeraria ni del gobierno”, protestó la usuaria de Facebook identificada como Yaimara Aguilar Zayas.
Su publicación fue acompañada de una fotografía del cuerpo cubierto de la occisa. Acorde a las palabras de la denunciante, “este país tan lindo se está yendo a la basura” por culpa de las “negligencias” de quienes lo gobiernan.
Como circunstancia agravante de su situación, la mujer subrayó la convivencia con niños en el hogar, para quienes la experiencia puede resultar traumatizante.
A pesar de lo dramático que resulta, el caso denunciado por Aguilar Zayas comparte similitudes con los de muchas otras familias que han sufrido maltratos e indiferencia de las autoridades a la hora de necesitar de servicios funerarios.
En fechas recientes, un suceso lamentable tuvo lugar en la provincia de Mayabeque cuando un grupo de personas se vio obligado a trasladar un ataúd a pie durante dos kilómetros hasta el cementerio, debido a la falta de transporte adecuado para el traslado del difunto.
En un video publicado en la red social Instagram, se puede ver a varias personas sosteniendo el precario ataúd ubicado sobre un "almendrón" (auto antiguo), mientras una mujer brinda detalles del angustioso panorama ante la inexistencia de un carro fúnebre.
A mediados de julio, un cubano denunció la odisea que tuvo que pasar para enterrar al tío de su esposa, que falleció en la casa, ya que la familia tuvo que asumir gastos y gestiones que en teoría le correspondían al Estado.
El denunciante, quien se identifica en Twitter como "Un esclavo del MINSAP", relató que cuando llamaron a la funeraria les dijeron que no había carros fúnebres, así que la familia tuvo que resolver un transporte para buscar el féretro. "Nosotros mismos metimos al muerto en la caja y nosotros mismos lo llevamos a la funeraria", señaló.
Días antes, los féretros de dos personas fallecidas fueron transportados en un camión de volteo en la ciudad de Palma Soriano, en Santiago de Cuba.
Una residente hizo llegar la denuncia al comunicador Yosmany Mayeta Labrada, acompañada de un video y fotos que mostraron a varios hombres colocando los ataúdes sobre la cama de un camión volquete.
Por las mismas fechas, la hija del actor cubano Carlos Massola denunció que pasaron siete horas esperando la llegada de un carro fúnebre que levantara el cuerpo de su padre. Ni la fama ni la residencia en la capital garantizan que los cubanos puedan tener servicios funerarios que respeten la dignidad de las personas.
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