No es el populismo y la chusmería que habitualmente engalana la propaganda y los actos de los Comités de Defensa de la Revolución; no, en su aniversario 64 la mayor “organización de masas” del régimen cubano escaló un peldaño más de ridiculez y tontería al celebrar la ocasión cantando “cumpleaños feliz” a los CDR.
Vacíos de contenido y sumidos en una derrota moral e intelectual que lleva al régimen de cabeza al derrumbe, los organizadores de eventos propagandísticos andan de capa caída, incapaces de crear nuevas consignas, aburridos de las viejas y resignados a despertar el “fervor revolucionario” con congas y alcoholifanes.
Allí, en primera fila, destacó el coordinador nacional de los CDR, el espía reconvertido en agricultor de macetas y repentista de “cultiva tu pedacito”. Gerardo Hernández Nordelo se desplazó este domingo hasta el Oriente de Cuba para celebrar el aniversario de la organización que intenta revitalizar, actualizando la clásica chivatería en cibercombate.
Del reparto Caribe, en Guantánamo, el regalador de regaderas partió raudo y veloz hacia Santiago de Cuba, provincia que se ganó el “privilegio” de ser la sede de la celebración del aniversario 64 de los CDR.
Allí lo recibió la primera secretaria del Partido Comunista de Cuba (PCC), Beatriz Johnson Urrutia. A pie de calle, no en lo alto de una azotea, adonde acostumbre encaramarse la dirigente cuando la calle se pone caliente.
Pero este 28 de septiembre estaba todo calculado y cronometrado para recibir a Nordelo Hernández, condecorado como “héroe” por el régimen gracias a su contribución al espionaje y al derribo de dos avionetas de Hermanos al Rescate, que provocaron la muerte de cuatro civiles.
Y así fue cómo, entrada la noche, llegaron Nordelo Hernández y Johnson Urrutia al barrio de Chicharrones [sugerente nombre] donde una “espontánea” conga los recibió al coro de “vivan los CDR”, entre contoneos trasnochados de un pueblo hambreado, sin energía y ninguneado por los dirigentes de un régimen totalitario y represivo.
“Un regalito para los odiadores que siempre piden ver al pueblo en las calles. iSe calentó Chicharrones en Santiago de Cuba!”, dijo el coordinador nacional de los CDR e sus redes sociales, compartiendo un video de la conga en la oscuridad. La ocasión sirvió para que el coordinador de la chivatería apreciara en sus manos una corneta china.
A continuación, compartió otro, patético, de esos que causan vergüenza ajena, en el que un grupo de cederistas canta “cumpleaños feliz” a la decadente organización. Rostros macilentos, vacilantes y violentos fueron captados por su cámara en un paneo circular que transmitió más una imagen de degradación, que de celebración.
“iEn Santiago de Cuba se acabó el acto por el 64 aniversario de los CDR, pero la fiesta sigue!”, escribió Hernández Nordelo en sus redes sociales, en otra publicación realizada a la mañana siguiente, con un video desde el auto que lo llevaba a su siguiente trinchera propagandística, en el que captó los remanentes de otra conga escenificada para dar la imagen de una fiesta perpetua.
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