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La crisis energética en Cuba obligó este viernes a cientos de personas a hacer largas colas en Santiago de Cuba para comprar gas licuado, luego de un apagón masivo que les ha impedido cocinar.
El 60% de la población gasificada en Santiago de Cuba aún no ha podido acceder al gas, lo que ha generado escenas caóticas, con multitudes dispersas por varios repartos de la ciudad en busca del combustible, informó el reportero local Yosmany Mayeta.
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La semana pasada el régimen informó una descarga parcial de un barco cargado de gas licuado, y dijo que con ella intentaría aliviar la tensa situación que existe en el país; pero el apagón masivo de este viernes agarró a muchos sin el producto.
Mayeta dijo que aunque las imágenes podrían confundirse con un carnaval, se trataba de cientos de personas tratando de conseguir gas licuado en medio del apagón.
La situación eléctrica se ha agravado al punto de que solo han intentado restablecer el servicio eléctrico en dos circuitos que abarcan hospitales críticos como el Infantil Sur "La Colonia Española" y el Clínico Quirúrgico Juan Bruno Zayas. El resto de la provincia sigue a oscuras, confirmó Mayeta.
El Ministerio de Energía y Minas (MINEM) informó que la desconexión total del Sistema Electroenergético Nacional (SEN) ocurrió el viernes en la mañana, tras la salida de servicio de la termoeléctrica Antonio Guiteras, una de las principales del país.
La Unión Eléctrica (UNE) trabaja en el restablecimiento del sistema, aunque no hay una solución a corto plazo, según indicó el primer ministro Manuel Marrero Cruz en una comparecencia en la radio y televisión cubana el jueves por la noche.
Marrero confirmó que la situación es "extremadamente crítica" y mencionó que, aunque se espera una leve mejora tras la descarga de un barco de combustible, no se prevé una solución inmediata.
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