Durante la visita que realiza el mandatario cubano Miguel Díaz-Canel por San Antonio del Sur, en la provincia de Guantánamo, un hombre a cargo de 29 niños en una escuela especial denunció que el gobierno los llevó a ese local y los abandonó, justo antes de que el huracán Oscar tocara tierra el pasado 20 de octubre.
La declaración se produjo en el contexto de las severas inundaciones provocadas por el ciclón, las cuales dejaron saldo preliminar de siete muertos en ese municipio guantanamero.
Asimismo, en respuesta a Díaz-Canel, quien afirmó este miércoles al llegar a la zona afectada que "ningún cubano ha sido abandonado" a su suerte en este desastre natural.
"Nos dejaron solitos allí con 29 niños, yo tuve que evacuar a mis cinco hijos, por poco nos ahogamos", replicó el hombre visiblemente angustiado, mientras el mandatario intentaba justificar las acciones del gobierno.
El afectado aseguró que las autoridades habían prometido dejar un equipo de rescate en caso de que el río se desbordara, pero no cumplieron.
"El gobierno nos llevó allí (en la escuela especial) y nos dejaron solos. Dijeron que iban a dejar un equipo para en caso de que el río se desbordara y nos dejaron solos. Yo tuve que rescatar a estas personas con ayuda de otro", dijo.
Díaz-Canel respondió a la crítica asegurando que la intención del gobierno era evacuar a las personas en riesgo. “El caso es que a ustedes los trajeron para aquí para evacuarlos, pero el fenómeno sobrepasó todo. Vamos a investigar eso.”, comentó, intentando tranquilizar a los presentes.
La situación en Guantánamo sigue siendo tensa, y los afectados por el huracán han expresado su frustración ante la falta de apoyo y recursos durante la crisis. Muchos familiares se encuentran pidiendo ayuda para localizar a personas que siguen desaparecidas; mientras que el régimen ha confirmado la muerte de siete personas producto de las inundaciones.
San Antonio del Sur e Imías son los municipios más afectadas por el paso de Oscar, y Díaz-Canel llegó a la zona tres días después del desastre, asegurando que "Toda Cuba está en función de ustedes. (...) Tengan la certeza de que no están solos, ni abandonados", dijo el gobernante a la población guantanamera.
El huracán Oscar llegó a la región oriental en los primeros días de apagón general en el país. Las personas no estaban bien informadas de la magnitud de la tormenta por la falta de electricidad que mantenía incomunicada a la mayoría.
Muchas familias en las zonas rurales no se pudieron evacuar a tiempo y lo han perdido todo, sus animales, sus cosechas, sus propiedades y algunos han perdido incluso la vida.
Según las cifras oficiales, solo se evacuaron en Guantánamo 15,000 personas: 9,000 en Imías y 6,000 en San Antonio del Sur.
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