El próximo cambio de hora en Cuba se llevará a cabo el domingo 3 de noviembre de 2024, a la 1:00 am, cuando los relojes se atrasarán una hora para dar inicio al horario normal o de invierno.
La Unión Eléctrica (UNE) informó en Facebook que el fin del horario de verano, el cual entró en vigor en marzo pasado, este ajuste implica que las mañanas comenzarán a amanecer más temprano, mientras que las tardes oscurecerán también con mayor antelación.
La medida, habitual en la isla, busca adaptar el uso de la luz natural a lo largo del día y estará vigente durante los meses de invierno.
El oficialista periódico Venceremos, de Guantánamo, publicó este lunes en Facebook que el domingo Cuba hará el cambio de horarios.
“Con este cambio de horario amanece y oscurece más temprano, por lo que existirá un incremento del pico eléctrico”, alertó el portal de noticias.
Además, hizo un llamado “a un uso racional de la energía eléctrica tanto en los hogares como en centros de trabajo”, lo que evidencia la persistente crisis energética en Cuba y anticipa un panorama preocupante de déficit en los próximos meses.
La práctica del cambio de horarios es una medida que se traduce en ahorro de combustible en varios lugares del mundo. Cuba adoptó por primera vez el horario de verano el 10 de junio de 1928, pero la práctica no tuvo mucha aceptación entonces, por lo que al año siguiente fue derogado el decreto que lo establecía. Sin embargo, comenzó a aplicarse de manera regular desde 1963.
Aunque las autoridades del régimen cubano aseguran haber estabilizado el Sistema Eléctrico Nacional, la realidad es que los apagones siguen marcando la vida de los cubanos que, en provincias como Holguín, sufren afectaciones que sobrepasan las 10 horas diarias sin suministro eléctrico.
Así lo reconoció la Empresa Eléctrica de Holguín a través de sus redes sociales, informando que el “déficit de generación” provocó este domingo apagones de hasta 11 horas en uno de los circuitos de la provincia.
Esta semana inició con pocas novedades alentadoras para los cubanos en cuanto al suministro eléctrico, una situación que se ha vuelto recurrente en los últimos meses.
Este lunes, la UNE anunció un déficit de generación que supera los 1,000 megavatios (MW).
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