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Los votantes de Miami-Dade participarán el próximo 5 de noviembre en una elección histórica: por primera vez en 60 años, el condado elegirá a un sheriff, un cargo que fue abolido en 1966 tras un escándalo de corrupción.
De acuerdo con Telemundo 51, esta restauración del puesto responde a la Enmienda 10, aprobada en 2018 por los votantes de Florida, Estados Unidos, que permite la elección directa de un sheriff en la región.
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La contienda electoral será entre dos candidatos: el cubano demócrata James Reyes y la republicana Rosie-Cordero Stutz, cada uno con un enfoque y trayectoria muy diferentes.
Actualmente, Reyes es el jefe de seguridad pública de la Policía de Miami-Dade y ha pasado 22 de sus 25 años en el servicio policial en la Oficina del Sheriff del Condado de Broward.
Empero, sus detractores le critican que nunca ha sido un oficial de policía y, de ser elegido, tendría bajo su supervisión a más de 3,200 oficiales en la zona.
De 46 años, nacido en Cuba, Reyes es hijo de un preso político y cuya familia emigró a Estados Unidos a fines de los 70. Es graduado en Criminología y tiene un máster en Justicia Criminal.
En tanto, Cordero-Stutz ha estado en la Policía de Miami-Dade durante 28 años, comenzando como oficial de patrulla, trabajando en robos y homicidios, y ascendiendo en las filas como sargento, teniente y mayor, hasta convertirse en subdirectora.
La reintroducción del cargo no solo representa un cambio significativo en la estructura de la policía local, sino que también simboliza una nueva era de rendición de cuentas y transparencia en las fuerzas del orden.
A medida que se acerca el día de la elección, la atención se centra en cómo los votantes decidirán sobre el liderazgo y la dirección de la seguridad en Miami-Dade, un aspecto vital para la comunidad y su bienestar.
Esta elección no solo impactará el presente, ya que sentará las bases para la gobernanza del condado en los años venideros.
Además, tendrá lugar el mismo día en que se decida la presidencia del país, entre la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump, en una contienda que marcha cerrada en extremo.
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