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Los votantes de Florida, Estados Unidos, tienen la oportunidad de hacer historia este 5 de noviembre, al decidir sobre dos importantes medidas: definir el rumbo del estado en cuanto a la legalización de la marihuana y la protección del derecho al aborto.
La propuesta sobre la marihuana permitiría a los adultos de 21 años o más poseer hasta 85 gramos (alrededor de 3 onzas) de cannabis y daría paso a su comercialización recreativa.
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De acuerdo con la agencia AP, Florida, que cuenta con una amplia industria de marihuana medicinal, podría así convertirse en una de las regiones en autorizar el uso recreativo de la planta, especialmente ahora que las autoridades federales analizan la posibilidad de reclasificarla como una droga de menor riesgo.
La medida sobre el derecho al aborto establece que los legisladores no podrán penalizar, prohibir o restringir esta práctica hasta que el feto sea viable, lo cual suele ocurrir después de las 21 semanas de gestación.
De ser rechazada, Florida mantendría su restrictiva ley de aborto de seis semanas, colocándola como uno de los primeros estados en limitar el acceso al aborto tras la anulación del fallo histórico de Roe vs. Wade.
Para ser aprobadas, ambas iniciativas requerirán el apoyo de más del 60 por ciento de los votantes. Estos temas han sido claves en la campaña demócrata, que busca movilizar a sus seguidores en un estado donde los republicanos tienen una ventaja de registro de un millón de votantes.
Liderados por el gobernador republicano Ron DeSantis, el Partido Republicano en Florida ha expresado su rechazo a ambas propuestas, argumentando que la legalización de la marihuana podría afectar el turismo debido al olor y que el acceso al aborto debe permanecer limitado.
Sin embargo, figuras de peso en el partido, como Donald Trump y el senador estatal Joe Gruters, han mostrado su respaldo a la legalización del uso recreativo de la marihuana, lo que añade una dimensión interesante al debate interno entre los republicanos.
Esta votación coincide con las elecciones presidenciales en las que los estadounidenses decidirán entre la demócrata Kamala Harris y el republicano Trump, en una contienda que ha polarizado al electorado y tiene al mundo expectante.
Hasta el momento, más de 78 millones de personas votaron anticipadamente en todo el país. Dada la alta participación y la intensidad de las campañas, es probable que el resultado de las elecciones generales y de estas importantes medidas en Florida no se conozca de inmediato tras el cierre de las urnas, anticipándose una noche electoral prolongada.
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