En un video que ha tocado el corazón de cientos de personas, @mariuby23 mostró el conmovedor momento en que se reencontró con su abuelo en Cuba tras dos largos años sin poder verse. La escena se llena de abrazos y lágrimas, y en el fondo se lee “Cuba duele”, reflejando lo que sienten muchos cubanos que han tenido que dejar a su familia atrás.
“Abuelo, después de 2 años no aguantaba más no verte”, escribió en el pie del post, acompañando el video con la canción "Yo Volveré" de Angel El White, un tema que resuena con la nostalgia de quienes han tenido que emigrar. Los comentarios explotaron de emoción, agradecimiento y hasta nostalgia, reflejando las historias de miles de cubanos que sueñan con un reencuentro así.
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“Gracias. Al señor Jesús yo vi al mío”, comentó un usuario, mientras otro agregaba: “Qué bendición poder volver”. Las lágrimas y la emoción se sentían a través de la pantalla; una prima de @mariuby23 escribió: “Mi prima me hiciste llorar que bien está mi tío”, a lo que la creadora respondió con un “ay prima yo me fui igual que cuando llegue”, mostrando cuánto la había conmovido volver.
Pero entre la emoción también hubo quienes no dejaron pasar la curiosidad sobre el carro que aparecía en el video. “¿Tendrán ese Mercedes aquí?” preguntó un usuario, y @mariuby23 respondió con humor, aclarando que era un Lincoln del 2024, lo que dio lugar a algunos comentarios más ligeros.
Para muchos, este tipo de reencuentros no solo son un momento de alegría, sino también un recordatorio de lo doloroso que puede ser estar lejos de los seres queridos. Al ver el abrazo de @mariuby23 con su abuelo, varios seguidores se sintieron identificados y llenaron el post de mensajes llenos de corazones, lágrimas y bendiciones. “Me dio mucha tristeza ese momento” comentó alguien; otro dijo, “Muchas bendiciones”, mientras alguien más suspiraba: “Hay Mimi cuánto anhelo ese día, muchas felicidades”.
Cada abrazo y cada lágrima en este video cuenta una historia de amor y distancia que toca a quienes, como @mariuby23, saben lo que es extrañar profundamente a su familia. En la distancia, cada reencuentro es una victoria; cada regreso, un recordatorio de lo que “Cuba duele”.
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