La crisis energética en Cuba sigue golpeando con fuerza al país. La Unión Eléctrica (UNE) informó este miércoles un déficit de generación eléctrica de más de 1,500 MW, lo que se traduce en extensos apagones que afectan tanto a la población como a los servicios esenciales.
Según los datos ofrecidos, las afectaciones comenzaron en la madrugada y se mantendrán a lo largo de toda la jornada. La empresa estatal que dirige Alfredo López Valdés había pronosticado una afectación de 1,450 MW en este horario, pero la realidad superó las previsiones.
En el día de ayer, la máxima afectación registrada fue de 1,563 MW durante el horario de mayor demanda, a las 6:10 p.m., según reconoció la empresa en sus redes sociales.
El servicio eléctrico continuó interrumpido durante toda la madrugada, y para las 7:00 a.m. de hoy, el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) reportaba una disponibilidad de 1,420 MW, frente a una demanda de 2,390 MW, dejando un déficit de 1,025 MW. Este déficit incrementará en las horas pico, alcanzando una afectación estimada de 1,503 MW.
Unidades críticas como la 5 de Mariel, y la 2 de Felton están fuera de servicio por averías, mientras otras están en mantenimiento, lo que disminuye significativamente la capacidad de generación.
Aunque se prevé la reincorporación de algunas unidades durante el horario pico, el déficit persistirá, con una disponibilidad proyectada de 1,747 MW frente a una demanda estimada de 3,180 MW.
Apagones programados en La Habana
Atendiendo a este escenario, la Empresa Eléctrica de La Habana anunció en sus redes sociales apagones programados debido al déficit de generación.
Los clientes de los Bloques 3 y 4 estarán afectados entre las 10:00 a.m. y las 3:00 p.m., mientras que el Bloque 1 enfrentará cortes entre las 3:00 p.m. y las 7:00 p.m. Finalmente, el Bloque 2 será afectado desde las 6:00 p.m. hasta las 10:00 p.m.
Estas interrupciones reflejan la crítica situación energética que enfrenta la Isla, una problemática que se ha intensificado en los últimos años, generando frustración y descontento entre la población, que reclama soluciones definitivas. Mientras tanto, el déficit energético sigue siendo una constante que agrava la calidad de vida de los cubanos.
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