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Antonio Gasalla, uno de los grandes maestros del humor argentino y recordado en Cuba por dar vida a la inolvidable "Mamá Cora" en la película de culto "Esperando la carroza" (1985), falleció este martes en Buenos Aires a los 84 años.
Con su partida, no solo se va un ícono del espectáculo en Argentina, sino también una figura que logró calar en la memoria colectiva de muchos latinoamericanos, incluyendo al público cubano, que lo adoptó como propio gracias a su talento inigualable.
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Actor, guionista, director y productor, Gasalla construyó una trayectoria brillante que dejó una marca profunda en el teatro, la televisión y el cine.
Su camino a la cima del espectáculo
Nacido en 1941 en Ramos Mejía, provincia de Buenos Aires, Antonio Gasalla desafió desde joven el destino que su familia había trazado para él: la odontología.
Sin embargo, su verdadera pasión lo llevó a la actuación, formándose en la Escuela Nacional de Arte Dramático.
Allí conoció a Carlos Perciavalle, con quien formaría un dúo inolvidable en el circuito del café-concert porteño, un espacio clave para la crítica social y la sátira durante las décadas de 1960 y 1970.
“Empezamos a hacer en clave de humor las escenas que hacíamos en serio durante las clases de arte escénico [...]: la escena del balcón de Romeo y Julieta o La gaviota de Chéjov”, recordó Gasalla sobre aquellos inicios que marcaron su estilo.
Su vínculo especial con Cuba
Su relación con Cuba no solo se limitó al impacto de su obra. Durante sus visitas a la isla, Gasalla presentó sus espectáculos y se ganó el cariño del público cubano, que lo recibió con entusiasmo en cada función.
Además, en una anécdota que él mismo relató en varias entrevistas, mencionó una experiencia curiosa relacionada con la santería cubana: tras ser advertido sobre una posible “brujería” en su contra, participó en un ritual de limpieza espiritual guiado por una santera local.
Este episodio reflejó su interés y respeto por la cultura popular de la isla y su capacidad para conectar, también fuera del escenario, con las tradiciones y creencias de los cubanos.
El café-concert y la sátira del teatro de revista
Gasalla, junto a Perciavalle y otros referentes como Enrique Pinti, fue protagonista de una época en la que la comedia porteña se nutría de la ironía política y el humor costumbrista, llevando a escena espectáculos que combinaban la risa con una mirada crítica sobre la sociedad argentina.
Ese mismo talento lo llevó luego al teatro de revista y al cine.
Sin embargo fue su "Mamá Cora" -la abuela entrañable de "Esperando la carroza" (1985)- dirigida por Alejandro Doria y la que lo convirtió en un fenómeno masivo y le aseguró un lugar en el imaginario popular de varias generaciones.
Un humorista que marcó época
A lo largo de su carrera, Antonio Gasalla creó personajes inolvidables que retrataban con ironía y agudeza la sociedad argentina y latinoamericana.
La Empleada Pública, Soledad Solari y La Abuela fueron algunos de sus personajes más queridos en la televisión.
Asimismo, sus entrevistas improvisadas y sus incisivas preguntas lo convirtieron en un referente del humor inteligente, capaz de incomodar y hacer reír al mismo tiempo.
A partir de los años 80, Gasalla dio el salto definitivo a la televisión, donde su talento se multiplicó en decenas de personajes que marcaron a varias generaciones.
El mundo de Gasalla, El palacio de la risa y Gasalla en la tele fueron algunos de los ciclos que llevaron su humor mordaz a millones de hogares.
Gasalla retrató con humor grotesco y una aguda observación a la “argentinidad”, ese conjunto de virtudes y contradicciones que, a través de su lente, también resonaron con el público cubano y latinoamericano.
Más allá de su rol como actor, Antonio Gasalla fue un perfeccionista total.
“Antonio coordinaba las luces, elegía la música y estaba pendiente de cada aspecto de sus espectáculos”, recordó Sebastián Borrás, su asistente durante más de dos décadas.
Su control sobre cada detalle técnico y artístico era absoluto, y su capacidad para resolver imprevistos en escena, legendaria: “Si ocurría un imprevisto en el escenario, él sacaba un as de la manga y lo resolvía sin que el público se diera cuenta de nada”, añadió Borrás.
La despedida de una leyenda
Gasalla había sido diagnosticado en 2020 con demencia senil, lo que lo mantuvo alejado del teatro y la televisión en sus últimos años.
Su salud se deterioró aún más en las últimas semanas tras una neumonía que lo obligó a permanecer internado por varios días.
Su muerte fue confirmada por su amigo y productor Carlos Rottemberg, y luego por la Asociación Argentina de Actores, que lo describió como “un indiscutido referente del humor y creador de personajes que forman parte de la cultura popular argentina”.
En el Teatro Maipo, uno de los escenarios que tanto amó, personalidades del mundo del espectáculo desfilan desde hace horas para darle el último adiós.
“Antonio terminó como Mamá Cora en la película, no la que hacía en el programa de Susana Giménez. La Mamá Cora del cine tenía demencia senil”, reflexionó Borrás, trazando un paralelismo tan doloroso como conmovedor.
Preguntas frecuentes sobre Antonio Gasalla y su impacto en el humor latinoamericano
¿Quién fue Antonio Gasalla y cuál es su legado en el humor?
Antonio Gasalla fue un destacado humorista argentino reconocido por su capacidad para retratar con agudeza e ironía la sociedad argentina y latinoamericana. Su personaje "Mamá Cora" en "Esperando la carroza" es un ícono del cine de habla hispana, y su obra en teatro y televisión dejó un legado imborrable en el mundo del humor.
¿Por qué Antonio Gasalla es tan querido por el público cubano?
Antonio Gasalla logró conectar profundamente con el público cubano gracias a su talento genuino y sus visitas a la isla, donde presentó sus espectáculos. Su cercanía con las tradiciones cubanas, como el respeto por la santería, también contribuyó a su aceptación y cariño por parte del pueblo cubano.
¿Cuál fue el impacto de "Mamá Cora" en la carrera de Antonio Gasalla?
"Mamá Cora" catapultó a Antonio Gasalla a la fama internacional y lo convirtió en un fenómeno masivo. Este personaje de la película "Esperando la carroza" se ha mantenido en el imaginario popular por generaciones, destacando su habilidad para combinar el humor con la crítica social.
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