Tras unas primeras horas de incertidumbre, en que incluso se llegó a pensar que se había tratado de un accidente de tránsito, ya la policía alemana apunta directamente a que lo sucedido ayer en Berlín se trata de un “presunto atentado terrorista”.
El camión “fue conducido deliberadamente hacia la multitud”, y de ese modo arrolló a un grupo de personas que se encontraban visitando un mercadillo navideño, en el centro de la ciudad.
Como consecuencia del hecho, de momento han fallecido 12 personas y otras 48 se encuentran heridas.
Los medios de prensa alemanes afirman que el autor del ataque es un paquistaní que residía en la ciudad. De él se sabe que nació en Pakistán, en 1993, y que llegó a Alemania a través de Passau (en la frontera con Austria), el 31 de diciembre de 2015. Había sido detenido con anterioridad por delitos menores.
El atacante fue detenido poco después del atropello. Su arresto se produjo gracias a un testigo que, tras ver cómo se bajaba del camión y se daba a la fuga, le siguió.
El testigo alertó a la Policía y estuvo hablando por teléfono con el servicio de emergencias mientras perseguía al sospechoso hasta el Tiergarten, el zoo de Berlín, donde fue finalmente arrestado.
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