En los últimos días ha aumentado el número de incendios forestales en algunos lugares del sureño estado de Georgia y en el norte de Florida. Especialmente delicada está siendo la situación en el condado Baker (Florida) y en el condado Charlton (en Georgia).
Miles de residentes han recibido una orden de “evacuación obligatoria” por el peligro que entraña la cercanía de las llamas a sus viviendas.
A ello se suma la densa capa de humo que cubre algunas localidades, lo que afecta principalmente a las personas con padecimientos respiratorios.
El área en la frontera entre Georgia y Florida también está bajo una alerta de humo denso.
Varios colegios están sirviendo de albergues temporales para quienes se encuentran desplazados de sus hogares. Varias carreteras se encuentran cortadas y sólo se permite el acceso a los bomberos. A ello se suma que las condiciones climatológicas están empeorando la situación, pues hay pocas lluvias y mucho viento.
En lo que va de año han sido reportados 320 incendios forestales en Florida.
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