El paso del huracán Irma por Cuba dejó cuantiosos daños no solo en sembrados, infraestructura eléctrica y de comunicaciones, sino también en el sector de trabajo por cuenta propia en la Isla, que padeció tanto las largas jornadas sin electricidad y los destrozos en sus locales, como los problemas en los suministros de mercancías para el correcto funcionamiento de sus empresas.
De los primeros se ha informado en los medios oficiales cubanos; en especial, de la recuperación y vuelta a la 'normalidad'. Sobre los segundos, sin embargo, se sabe más bien poco.
Partiendo, precisamente, de las afectaciones que dejó el poderoso huracán en los negocios y empresas de cuentapropistas cubanos, el presidente de Somos+, Eliecer Ávila, ha aprovechado para conversar sobre el estado del trabajo por cuenta propia en Cuba, las políticas gubernamentales, las “tímidas reformas” que ha habido, y las muchas trabas que deben enfrentar quienes deciden lanzarse al camino del emprendimiento y el trabajo no estatal.
Sobre “esos pequeños negocios que han cambiado la fisonomía del país” habla el joven opositor cubano y también cuentapropista. El mérito, sin embargo, no es según Avila del estado cubano que sí “incumplió todas y cada una de las promesas que les hizo a nuestros emprendedores” y al que Eliecer le critica que “ni creó un sistema de suministros adecuado y mayoristas, ni le brindó posibilidades de importación y exportación suficiente para que podamos ser competitivos con el resto del mundo (...) no le otorgó a los comerciantes cubanos los derechos jurídicos (…) y las oportunidades de acceso a Internet de banda ancha”.
Igualmente se refiere al estigma y prejuicio que ha construido el gobierno contra los emprendedores a quienes, por su parte, les dice que “no podemos conformarnos con que nos pongan la corriente, con que nos den unas dádivas para nosotros seguir existiendo en cuba escondidos con malos manejos, no pudiendo dormir porque sabemos que para obtener lo que necesitamos tenemos que comprarlo en un mercado negro (…)".
Denuncia, además, todo lo que padecen los cuentapropistas cubanos a consecuencia de la “galopante corrupción” en la Isla, donde hay uno intentando vender sándwich y 10 intentando vivir de él, donde “hay que regalarle los bocaditos al inspector cada vez que pasa por ahí, hay que darle dinero al que otorga y renueva las licencias, hay que caerle bien al del Partido Comunista para que no nos mande auditorías todo el tiempo y nos cierre los negocios".
“Ha llegado el momento de alzar nuestras voces y unirnos todos porque mientras sean unos poquitos nos van a apolismar, nos van a difamar, nos van a mutilar física y moralmente”, los impele.
No es necesario, aclara, afiliarse a ningún movimiento político independiente ya existente, “si no quieren unirse a nosotros o a otros por toda la inmensa propaganda que se ha hecho en nuestra contra, por todas las consecuencias que eso puede implicar, únanse ustedes, únanse las personas que compartan los mismos intereses, (…) empujemos cada cual por nuestra parte”, anima Eliecer.
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