Recientemente, durante la celebración del V Foro de televisión digital en Cuba, se anunció que próximamente habrá un apagón analógico parcial en el país, procedimiento que marcará el inicio de una etapa con posible fecha de conclusión entre el 2021 y el 2023, en que ya se dará por culminado el tránsito hacia la señal digital.
Según lo indicado por medios de prensa y autoridades de la Isla, en estos momentos la señal digital alcanza el 60 % del territorio nacional, y abarca los principales centros urbanos, motivo por el cual ya está disponible para el 70% de la población.
Sin embargo, aunque se presuma de que a la tecnología analógica le queda poco tiempo de vida en Cuba, la realidad indica que la calidad de la señal digital sigue siendo mala e inestable en las zonas de la Isla en las que ya está instalada.
Los entrevistados en este reportaje de Martí Noticias explican que con el más mínimo cambio de tiempo, que puede ser una simple llovizna, el televisor apenas se ve y se ven obligados a regresar a la señal analógica.
A la mala calidad, se suma el elevado precio del aparato encargado de decodificar la señal, la llamada "cajita" que, para más desgracia, se comercializa en moneda convertible, que vuelve a colocar a los cubanos en la disyuntiva de vivir en una moneda en la que no se les paga.
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