El Gobierno de Cuba utiliza niños para hacer propaganda por el SÍ

"Arriba los cubanos, el domingo a votar temprano" repiten varias veces en este vídeo decenas de niños cubanos vestidos de pioneros.

El material, donde una vez más se ve a varios niños cubanos usados para hacer propaganda del régimen, fue difundido en el perfil en twitter de la emisora Radio COCO.

"Hoy estaba haciendo unas gestiones en el policlínico Mario Escalona, de Alamar y de pronto apareció esta marea humana con la consigna #YoVotoSí, invitando a votar por el Sí este 24 de febrero" se afirma en la descripción del vídeo.

Este domingo, iniciada ya de la jornada de votaciones para la nueva constitución en Cuba, en el mismo perfil se publicaba otro material con pioneritos pidiendo a "mami y papi" que fueran a votar temprano este domingo en favor del sí, la única alternativa defendida por el régimen cubano.

Ambas escenas, por su parte, muestra una vez más el uso de menores de edad por parte del régimen cubano para hacer campaña política.

No son pocas las ocasiones en las que niños cubanos, aparentemente en actos voluntarios y espontáneos y vestidos usualmente de pioneros, tienen que repetir consignas o son llevados a actos de apoyo gubernamental, a veces en horario lectivo o en jornadas de descanso, como la de este domingo de votaciones.

En esta ocasión ponen en evidencia la saturación propagandística a que han sido sometidos los cubanos en las jornadas previas al referéndum de este 24 de febrero, donde se deberá aprobar o rechazar la nueva constitución cubana.

Hasta los más insólitos espacios el gobierno cubano ha llevado su defensa del sí: autobuses, muros, escuelas, círculos infantiles y, por supuesto, los perfiles en las redes sociales de autoridades cubanas, se han convertido en escenario para su propaganda oficialista.

Este domingo se realiza en Cuba la votación por la nueva Carta Magna, que pretende erigir al Partido Comunista como órgano rector supremo.

Unos 8 millones de cubanos mayores de 16 años están convocados para votar por la nueva Constitución, que reemplazaría la Carta Magna de 1976. Los residentes en el extranjero, en cambio, no han podido ejercer su derecho al voto, aunque en las redes sociales muchos han denunciado lo discriminatorio de esta decisión y han hecho campañas para demandar un no al nuevo proyecto constitucional.