Este artículo es de hace 8 años
La Sala Bataclán, en París, estrena "nueva fachada".
En ella son palpables las huellas del terrible suceso ocurrido en ese lugar el 13 de noviembre del 2015, cuando un grupo armado terrorista irrumpió en el recinto y ejecutó a sangre fría a 191 personas.
Ni París, ni Francia, ni el mundo en general han podido sobreponerse y olvidar lo sucedido aquella noche.
Queda presente en nuestra memoria aquellas terribles imágenes de unas personas colgando desde una ventana hacia el exterior del edificio, o aquellas otras huyendo despavoridas.
Detrás, como un martillo, el sonido de las armas descargándose contra algún cuerpo.
Detrás también queda la sangre, las vidas inocentes que esa noche se apagaron.
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