Resulta insólito casi, pero ocho familias de Paso del Toa, en Baracoa, se refugiaron durante el paso del huracán Matthew, en una cueva.
Tras el paso de Matthew, todavía una de las familias permanece allí, porque no tienen dónde ir.
Una de las afectadas declara que no han recibido la visita de ninguna autoridad ni ayuda gubernamental.
No fueron los únicos, pues alrededor de 90 personas de Jobo Claro, en Maisí, también se refugiaron del huracán en una cueva de grandes dimensiones.
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