Hombres armados irrumpieron en un local donde tenía lugar una pelea de gallos clandestina, y comenzaron a disparar con sus rifles automáticos AK-47 contra los asistentes, dejando un saldo de seis personas muertas.
Las autoridades dicen que otras ocho personas resultaron heridas.
Las imágenes, grabadas con una cámara de seguridad muestran el momento exacto en que los hombres armados llegaron al lugar y abrieron fuego.
Uno de los asistentes salvó milagrosamente la vida al lanzarse de cabeza dentro de la valla.
Terminada la balacera, se quitó un cuerpo inerte que le cayó encima, brincó la barda y salió del lugar dejando a los dos gallos que, a pesar del tiroteo, continuaron la pelea como si nada hubiese pasado.
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