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La selección alemana no quedaba eliminada en la primera fase de un mundial desde 1938, tras perder en la tanda de penaltis ante Suiza, aunque en aquel campeonato se jugaron directamente los octavos de final.
Los de Joachim Löw llevaban cuatro semifinales consecutivas y llegaron a Rusia como uno de los tres equipos favoritos, junto a Brasil y España.
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Es cierto que este torneo mundial está deparando muchas sorpresas y sufrimiento para los equipos, en teoría, superiores. Sin embargo, nadie esperaba una eliminación tan temprana de Alemania, que además queda última de su grupo tras dos derrotas (ante México y Corea del Sur) y una victoria ante Suecia en el último minuto del partido.
Alemania, España e Italia
No obstante, la eliminación de Alemania no es la primera de un vigente campeón. Le ocurrió lo mismo a la selección española en el Mundial de Brasil en 2014. Los de Vicente Del Bosque llegaron tras conquistar dos Eurocopas y un Mundial, pero perdieron los dos primeros partidos ante Países Bajos y Chile. Sólo pudieron ganar a Australia.
Cuatro años antes, en el Mundial de Sudáfrica, Italia hizo lo mismo cuando defendía el título ganado en Alemania. En un grupo relativamente fácil, empataron dos partidos ante Nueva Zelanda y Paraguay, y perdieron frente a Eslovaquia.
Parece una maldición, la maldición del campeón, que podría ser más espectacular si Brasil hubiese sufrido mismo castigo tras ganar el Mundial de 2002 en Corea del Sur y Japón, pero cayó en cuartos de final ante Francia.
Una Francia que venía de caer en la primera fase del mundial de 2002, donde defendía el título mundial conseguido en el torneo celebrado en terreno galo en 1998, en aquella final mítica ganada a Brasil por tres goles a cero.
Una maldición muy vieja
Hay que viajar muy atrás para encontrar otro caso parecido, hasta 1966. En ese Mundial, disputado en Inglaterra, Brasil llegaba defendiendo dos títulos consecutivos, los de 1958 y 1962. Ganó el primer partido a Bulgaria, pero fue eliminado tras caer ante Hungría y Portugal.
Dieciséis años antes, Italia grabó en la historia el primer precedente de un campeón eliminado a las primeras de cambio. Los transalpinos llegaron como vigentes campeones del Mundial de 1938, el último celebrado antes de la II Guerra Mundial y el único en el que ha participado el equipo de Cuba.
En 1950 sólo participaron trece equipos. Birmania, Filipinas e Indonesia se retiraron y la India hizo lo mismo cuando la FIFA prohibió a sus futbolistas jugar descalzos.
Italia perdió ante Suecia y ganó a Paraguay, pero sólo un equipo pasó a la primera fase y fue el sueco, con un punto más.
¿Por qué?
¿Cuáles son las razones de que el vigente campeón caiga en la primera fase? Hay muchas, pero si comparamos a las últimas selecciones que han sufrido este hecho, el punto en común de todas ellas es la falta de renovación en el equipo.
Los entrenadores de estos equipos confiaron en los mismos jugadores que ganaron el Mundial previo, pero que también llevaban años cosechando buenos resultados. Eran futbolistas que crecieron juntos en categorías inferiores, que quizá llegaron al último torneo ya con demasiada edad o menor ímpetu que antes.
El próximo campeón debe tomar nota para no sufrir la misma maldición en la edición de Catar en 2022.
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