Solo ocho firmas estadounidenses exhiben sus productos en la feria internacional de comercio en Cuba, cinco menos que las 13 que acudieron el año pasado, una muestra de cómo ha mermado la presencia de empresarios de ese país en dicho evento tras el enfriamiento de las relaciones entre Washington y La Habana, informó la agencia Reuters.
“Trump ha asustado a todos”, dijo Eduardo Aparicio, gerente general de la empresa de logística Apacargoexpress, que opera bajo una exención al bloqueo que permite a compañías de Estados Unidos vender alimentos y suministros médicos en la Isla.
Trump endureció en 2017 el embargo a Cuba y redujo drásticamente el número de diplomáticos en su embajada en La Habana, debido a incidentes de salud entre sus empleados.
Luego de la distensión entre los expresidentes Raúl Castro y Barack Obama en 2014, decenas de empresas norteamericanas participaron en las ferias de 2015 y 2016, buscando hacer negocios en Cuba.
“No es que muchas cosas hayan cambiado con la administración Trump, pero las perspectivas sí. Ya no se siente como si estuviéramos avanzando”, reveló Jay Brickman, vicepresidente de la naviera Crowley Marítime Corporation, que durante 17 años ha mandado alimentos a la Isla.
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