La empresa Correos de Cuba no indemniza a sus usuarios tomando en cuenta el valor del contenido de los bultos postales, sino considerando solamente su peso.
Según informó al periódico Adelante José Luis Estévez Arias, director de operaciones de la entidad en Camagüey, eso es lo que establece la normativa nacional de la institución.
Además, no siempre pueden utilizarse los seis carros que posee el territorio para la distribución de los paquetes, a veces debido a sus años de explotación y otras a su empleo en otras gestiones.
Según el funcionario, desde el pasado mes de marzo no se reportan quejas de clientes por la demora en la llegada de los bultos.
Añadió que en todos los municipios de la provincia existen tres establecimientos para que sus habitantes recojan los paquetes enviados desde el exterior, mientras que aquellos de procedencia local se reciben en la unidad a la cual pertenecen sus destinatarios, de acuerdo a su zona de residencia.
Los envíos internacionales llegan al Centro de Clasificación provincial en rastras, y los nacionales en vehículos de la Empresa de Ómnibus Nacionales.
Estévez Arias recalcó que Correos tampoco se responsabiliza por la pérdida de los paquetes que no lleguen a ellos, solo por dificultades con el peso y embalaje.
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