El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un; estrecharon este miércoles sus manos antes de la reunión que mantendrán en Hanói.
Este gesto se produjo frente a una hilera de banderas de sus países en el hotel Metropole en la capital de Vietnam.
"Creo que tu país tiene un potencial económico tremendo, increíble, ilimitado. Y creo que vas a tener un futuro tremendo... Ayudaremos a que eso ocurra", aseguró el dirigente estadounidense al mandatario norcoreano.
Se trata de la segunda cumbre que mantienen Trump y Kim Jong Un tras el encuentro de Singapur el año pasado. En aquella ocasión se abordaron pocos detalles sobre cómo desmantelar las armas nucleares y misiles balísticos de Pyongyang.
Esta nueva reunión se produce ocho meses después de que se comprometieron a trabajar hacia la desnuclearización en la península coreana y mejorar los vínculos.
Ambos dirigentes apuestan a que su relación personal puede superar las diferencias en torno a las armas nucleares de Pyongyang y poner fin a más de 70 años de hostilidades.
Trump dijo a fines del año pasado que él y Kim se "habían enamorado" y en la víspera de su viaje a la segunda cumbre declaró que ambos han desarrollado una "relación muy, muy buena".
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