El artista mexicano Jesús Benítez, quien fue deportado de Cuba el 10 de mayo por participar en la Bienal de La Habana paralela, ha señalado a la cadena Milenio que no regresará al país mientras esté el actual sistema.
“No volveré a ir a Cuba, por lo menos no durante este régimen, pero espero algún día regresar porque es un país con grandes expresiones del arte”, confesó.
Tanto él como la creadora también mexicana Ximena Luna Gaona fueron deportados justo el día que estaba programada la inauguración de su exposición 'Impulso' en el Museo de la Disidencia en Cuba, un espacio del artista independiente Luis Manuel Otero Alcántara.
Ambos arribaron a la Ciudad de México cuando en La Habana se inauguró esa obra y los presentes en ese sitio se preguntaban dónde estaban los realizadores mexicanos.
"Esta fue la exposición por la que el Estado cubano me censuró y mantuvo secuestrado por seis horas para después deportarme. Si mi voz sirve para que casos como estos no se repitan en el futuro, nunca callaré, el arte no es un delito", publicó en su perfil de Facebook días después de la deportación.
Según detalla en Milenio, Benítez acudió al consulado de México en La Habana después de recibir una citación el 9 de mayo. El representante de su país le comentó que no era un delito mayor porque la exposición no era para lucrarse.
Sin embargo, en la Dirección de Identificación y Migración cubana le fue retenido su pasaporte y en un cuarto pequeño unos policías vestidos de civiles le acusaron de "pertenecer a la CIA, pero en general me dijeron que había violado mi estatus migratorio por haber convocado vía Facebook a la inauguración de la exposición", cuenta a ese medio.
“Durante estos tiempos de la entrevista, pues nos hicieron esperar entre 30 a 45 minutos por cada visita, y alrededor estuvimos secuestrados durante más de seis horas, sin derechos que considero básicos”, apunta Benítez.
Los agentes de la seguridad cubana los llevaron hasta el aeropuerto en dos patrullas. Una vez en la terminal tuvieron que suplicar para que les permitieran cambiar los pesos cubanos por mexicanos.
"Solicitamos una carta para que nos dieran las razones de expulsión y no la recibimos", concluye este artista.
Durante la Bienal de La Habana, tanto artistas cubanos como extranjeros se presentaron en el programa paralelo que organizaron creadores independientes y no alineados con el gobierno, la mayoría de ellos en contra del Decreto 349 que limita el arte en Cuba.
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