Cubanos recuerdan el Período Especial: "No había nada"

Cientos de cubanos recordaron cómo hicieron para sobrevivir una de las etapas económicas más difíciles de la historia del país: el Período Especial.

“Me gustaría que me ayudaran a recordar cosas del Período Especial, por ejemplo, yo me acuerdo de los pitusas zíngaro y los tenis yutapai... díganme qué recuerdan ustedes”, retó un cubano en Facebook esa década de escasez y necesidad.

“Yo recuerdo que no había nada, ni jabón para lavar ni para bañarse”, dice María Otero; mientras Yamilet Ruiz afirma que era tal la crisis que en su provincia las hamburguesas se vendían por carnet de identidad.

La escasez de productos básicos desde 2018 y el anuncio del Gobierno de que hasta marzo no se podrá satisfacer la demanda de los mismos, hace temer desde entonces el regreso de aquellos temidos años, algo que las autoridades del régimen niegan de manera rotunda.

Algunos recordaron que lo más difícil de los años 90 del pasado siglo fue alimentarse, por lo que alguna vez comieron picadillo de cáscara de plátano burro, o debieron cocinar con cebo de res o de carnero, lo cual también servía para hacer jabones.

“Cerca de mi casa había una fábrica de hacer harina animal y las personas se metían en la laguna de tratado de residuos a sacar el cebo de desecho, con la policía cayéndole atrás, para procesarlo con sosa cáustica y fabricar jabones, los cuales se cotizaban a un precio de 25 pesos”, afirma Yoandy Jiménez.

Para otros, la "carne de gato" los salvó de la inanición, y quienes querían olvidar las penas solo tenían a mano "la walfarina", un ron que se destilaba con heces de bebé para acelerar el proceso de fermentación.

“Yo llegué a pagar 120 pesos por una caja de cigarros, que era equivalente a un dólar. Había dinero, pero no había nada que comprar”, comenta otro cubano.

Vestir en esa época era otro gran reto para un cubano. “Se usaban alpargatas de cámaras de bicicleta y vestidos de sacos de harina” que la gente decoraba con pintura de aceite. Los llamados chupameaos fueron una alternativa de calzado para varios y cuando las cosas fueron mejorando aparecieron "los tiki tiki", unos zapatos de charol "con un lacito arriba", explicaron otros usuarios.

Dada la dependencia del gobierno cubano de la extinta Unión Soviética, la caída del bloque socialista y, en consecuencia, el término de las importaciones de combustibles, alimentos, maquinaria e inversiones de todo tipo hacia la Isla, dejaron al país sumido en la crisis más profunda de su historia reciente que abarcó todos los ámbitos de su economía.

Al margen de un discurso oficial que hablaba de entereza y alababa la inventiva del cubano para resistir la crisis, las familias resistían como podían, tal como cuentan hoy en el citado post de Facebook.

Una cubana señala que "es triste acordarse de la miseria y la necesidad de los cubanos. Eso duele mucho y cada día más miseria, de pensar me duele el corazón", y otra usuaria sugiere que esos años significaron la muerte: “no quiero recordar esos momentos tan pésimos, porque nos vamos a volver a morir”.