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La misión de observación electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para las elecciones en Estados Unidos ha emitido una declaración en la que asegura no haber observado ninguna irregularidad que ponga en duda los resultados arrojados por el escrutinio.
Como refleja en su informe, la misión de la OEA “no ha observado directamente irregularidades graves que pongan en tela de juicio los resultados hasta el momento”. En este sentido, la declaración de la OEA responde diplomáticamente a las acusaciones de fraude lanzadas por el presidente Trump.
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Asimismo, los observadores de la organización internacional declaran apoyar “el derecho de todos los partidos contendientes en una elección a buscar reparación ante las autoridades legales competentes cuando crean que han sido agraviados”. Nuevamente, el mensaje se dirige al candidato republicano, quien ha advertido que habrá un gran proceso de litigios para denunciar lo que su campaña considera como actos fraudulentos en estas elecciones.
Mientras apoya el derecho de los contendientes a recurrir frente a los tribunales, la misión de la OEA también declara que sus observadores “no fueron testigos de ninguna de las irregularidades antes mencionadas”, aludiendo a las presuntas maniobras que denuncia el equipo de campaña del republicano.
"Sin embargo, es crucial que los candidatos actúen de forma responsable, presentando y argumentando reclamos legítimos ante los tribunales, no especulaciones dañinas o sin base en los medios públicos", añadieron los observadores en su informe, en lo que constituye un claro mensaje a las declaraciones hechas desde la Casa Blanca por el presidente Trump después de las elecciones.
De manera directa, los observadores de la OEA apuntaron a las declaraciones hechas en días posteriores a la votación por “un candidato en particular”, que cuestionaban “el avance y la credibilidad del voto”.
La misión de observación de la OEA recoge en su informe las declaraciones textuales de Trump: “Este es un caso en el que están tratando de robar una elección. Están tratando de manipular una elección y no podemos permitir que eso suceda". Para los expertos de la OEA, este tipo de declaraciones constituyen unas “calumnias sobre el proceso electoral de Estados Unidos”, que debilitan la institucionalidad democrática del país.
En el caso del candidato demócrata, la misión observa que sus declaraciones post-electorales resultaron más adecuadas a la gravedad del momento. En su informe refleja las palabras de Joe Biden exhortando a la ciudadanía a mantener la calma asegurando que "... el proceso está funcionando" y reflejaría "... la voluntad de los votantes".
La misión de observación electoral de la OEA, encabezada por el secretario general de la organización, Luis Almagro, se desplegó tras una invitación del Departamento de Estado norteamericano y estuvo compuesta por 28 expertos y observadores de 13 países.
"La misión de la OEA urge a todos los partidos políticos, candidatos y ciudadanos a permitir que esta democracia prevalezca y que el resto del proceso electoral se desarrolle dentro del marco de la ley", concluye el documento de 20 páginas, publicado este viernes.
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