Autoridades aeroportuarias cubanas responsabilizaron de las demoras en el despacho de pasajeros en el Aeropuerto de La Habana al exceso de equipaje de los viajeros y a los retrasos de las aerolíneas en el arribo de los vuelos.
“La llegada de una hora tarde de una aerolínea, hace que se congestione con el vuelo que llegó anteriormente y con el vuelo que va a llegar después, lo que trae grandes complicaciones”, afirmó Julio Alberto Alonso Reyes, director general de la Empresa Cubana de Servicios Aeroportuarios (CACSA), quien en un reportaje para el Noticiero de Televisión enfatizó que trabajan con las aerolíneas para un mayor cumplimiento de los horarios previstos de arribo.
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Además del retraso en la llegada de los vuelos, los directivos entrevistados achacan también la demora al exceso de equipaje de los pasajeros que arriban Cuba. Alrededor del 50% de visitantes que llegaron a las terminales 2 y 3 del Aeropuerto de La Habana en los primeros 21 días del mes fueron directamente para el llamado “canal rojo”, es decir, el destinado al pesaje y control de equipajes.
“En otro momento esos pasajeros cogían el canal verde en el orden de un 90% y hoy está en un 50%”, dijo Jorge Luis Bubaire Quintana, jefe de la Aduana General de la República en el Aeropuerto "José Martí", quien subraya que en estos momentos cada pasajero arriba con una media de cinco a seis bultos, lo que en su opinión “complejiza la situación aeroportuaria”.
El directivo añade que varias aerolíneas norteamericanas están dejando parte de los equipajes en los aeropuertos de origen por falta de capacidad en los vuelos, lo que complica todavía más el panorama.
El jefe de la Aduana en el Aeropuerto aseguró que están en el proceso de diseño de nuevas medidas técnico-organizativas que pasan por un cambio de horario de trabajo de las brigadas aduaneras, particularmente en la terminal 2 y 3, de forma que puedan cubrir la totalidad de las posiciones en todos los tramos horarios.
También añadió que piensan aumentar de 11 a 19 las balanzas destinadas a pesar el equipaje, con vistas a disminuir el tiempo de espera.
Aunque el reportaje de la Televisión Cubana no alude al tema, en medio de tantas colas y esperas en el Aeropuerto se vuelve casi imposible el distanciamiento social estipulado para evitar los contagios de coronavirus, que viven un repunte en Cuba, muchos de ellos importados del extranjero.
El principal aeropuerto cubano habría recibido unos 600 vuelos en las tres primeras semanas de diciembre, a razón de una treintena diarios. En esa etapa fueron atendidos más de 663.000 viajeros, de ellos el 61.3 por ciento cubanos residentes en el país y el 24.8 % ciudadanos de la isla que residen en el extranjero.
A inicios de semana trascendió el caso de un cubano que viajó a La Habana desde el aeropuerto de Fort Lauderdale, en Florida, y denunció que estuvo siete horas en la Terminal 3 del Aeropuerto Internacional “José Martí” en una cola de más de 300 viajeros que tenían que pesar su equipaje, lo que calificó de "odisea surrealista”.
A mediados de noviembre -coincidiendo con la reapertura del Aeropuerto de La Habana- la Aduana General de la República de Cuba anunció que dejaba de tener efecto en todos los aeropuertos del país la limitación temporal de dos piezas de equipaje acompañante de 32 kilos, y que se retornaba a la regulación previa, consistente en la posibilidad de importar hasta 125 kg, 30 de ellos libres de costo.
El severo desabastecimiento en Cuba, unido a los meses en que que solo estuvieron permitidos unos pocos vuelos humanitarios por la pandemia de coronavirus, han traído como consecuencia que tras la reapertura de los vuelos regulares, los viajeros aprovechen al máximo la carga de importación de artículos permitida.
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