La policía del Capitolio debió desenfundar sus armas para disuadir a los manifestantes que intentaban entrar en la Cámara de Representantes, durante los disturbios de este miércoles.
“Oficiales de seguridad de la Cámara y la policía del Capitolio han desenfundado sus armas mientras los manifestantes golpean la puerta principal de la cámara”, dijo vía Twitter el congresista Dan Kildee.
El legislador también calificó los actos de los manifestantes como “un ataque a Estados Unidos”, y dijo que “una turba furiosa no podía cambiar la voluntad del pueblo”.
Por su parte, el senador Marco Rubio instó al presidente a que enviara recursos a las fuerzas del orden que estaban siendo atacadas en los alrededores y dentro de la importante sede legislativa.
“Es crucial que ayude a restaurar el orden enviando recursos para ayudar a la policía y pedirles a los que continúan allí que se mantengan firmes”, dijo el senador por el estado de Florida.
El mismo pedido fue hecho por el presidente electo Joe Biden, quien además llamó a Trump a aparecer en televisión y defender la Constitución de Estados Unidos, pues lo que estaba sucediendo “no eran manifestaciones, sino insurrección”.
El actual presidente tuvo una intervención desde la Casa Blanca donde pidió conservar el orden y que los manifestantes se retiraran a sus hogares, diciendo que se necesitaba “ley y orden” en este momento.
El jefe de la policía del Distrito Columbia, Robert Contee, ha certificado la decisión de la alcaldesa Muriel Browser de establecer el toque de queda entre las 6 de la tarde y las 7 de la mañana de este jueves.
Igualmente, se aseguró que a partir de esa hora efectivos de la policía local y de los estados de Maryland y Virginia comenzarían a desalojar a los manifestantes, de conjunto con la Guardia Nacional.
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