El presentador cubano Carlos Otero dijo que no creía en diálogo con quienes "no creen en nosotros", a raíz de una convocatoria del Movimiento San Isidro que ha generado polémica y debate.
"No creo en diálogo con quienes no creen en nosotros", escribió Otero en su cuenta de Instagram.
Entre los comentarios en la publicación del presentador, figura el de Luis Manuel Otero Alcántara, líder del Movimiento San Isidro, que ha insistido en que el diálogo es entre la ciudadanía cubana y no con el gobierno, aunque se ha malinterpretado su llamado.
"El régimen va a creer en el cubano y lo sentaremos a que recojan las maletas nosotres los cubanes", escribió Alcántara.
La activista Omara Ruiz Urquiola aclaró también en una entrevista con el presentador cubano Alexander Otaola, que el diálogo era entre los cubanos que querían cambios en Cuba, para intercambiar ideas y opiniones, pero se ha malentendido porque el término generalmente se usa con respecto a las autoridades.
Durante el programa TN3 de América Tevé, conducido por Carlos Otero y la venezolana Mónica Pascualotto, Alexis Valdés dijo que estaba a favor del diálogo, mientras que el presentador se mostró en desacuerdo, pero en lo que sí coincidieron ambos es que en la Cuba que sueñan tiene que haber lugar y respeto para todas las opiniones.
El Movimiento San Isidro convocó a inicios de marzo a un proceso de diálogo nacional, a través de una plataforma a la que llamaron Patria y Vida, para debatir propuestas ante las "erráticas decisiones del Gobierno" y superar la "grave crisis" que padece Cuba, según propusieron sus integrantes en un comunicado.
La propuesta se interpretó por muchos como una especie de negociación con el régimen cubano, pero el Movimiento San Isidro y quienes apoyan la iniciativa han advertido que, como indicaron en el comunicado, se refieren a un diálogo entre "jóvenes, grupos feministas, movimientos animalistas, artistas, organizaciones sociales y políticas, afrodescendientes, iglesias, familias, barrios, vecinos, gremios laborales, la diáspora cubana" para que "expresemos y conversemos sobre nuestras mejores intenciones para vivir en una Cuba próspera, libre, democrática y respetuosa de los derechos humanos".
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