La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y sus Relatorías Especiales para la Libertad de Expresión (RELE) condenaron la represión en Cuba contra artistas, periodistas independientes y activistas por los derechos humanos.
En un comunicado de prensa la organización hizo un llamado al Estado cubano a detener de inmediato la persecución contra quienes ejercen el derecho a la libertad de expresión.
La CIDH refiere la escalada represiva en Cuba contra los periodistas independientes, artistas y activistas que luchan por su derecho a expresarse libremente. En este sentido han señalado especialmente el "hostigamiento a las personas integrantes del Movimiento San Isidro (MSI)".
La institución menciona entre sus mayores preocupaciones las numerosos detenciones arbitrarias reportadas en Cuba y la constante vigilancia policial fuera de las casas de periodistas y activistas, lo que consideran que equivale a un arresto domiciliario.
"El 3 de abril, la RELE se reportó la presunta detención arbitraria del artista Luis Manuel Otero Alcántara, coordinador del MSI. De acuerdo con información públicamente, varias personas activistas se habrían dirigido a la estación policial de La Habana Vieja para averiguar sobre su paradero y exigir su liberación, motivo por el que también habrían sido detenidas Carolina Barrero, Maykel "Osorbo" Castillo, Amaury Pacheco, Yenisleidys Borroto y Eliexer Márquez. Según la activista Anamely Ramos, habrían sido "llevado a golpes" hacia otra estación en el municipio del Cerro. Asimismo, el 5 de abril habrían sido detenidos en La Habana los activistas y periodistas Luis Manuel Otero, Héctor Luis Valdés, Esteban Rodríguez, María Matienzo, Kirenia Yailit y Manuel Cruz. Por otra parte, el activista opositor Bárbaro de Céspedes habría permanecido desaparecido durante una semana en Camagüey, luego de ser detenido en la puerta de la iglesia Nuestra Señora de la Merced cuando repartía papeles con frases de José Martí", señala el comunicado.
El texto hace referencia, además, a hechos más recientes como la detención de Luis Manuel Otero Alcántara y el allanamiento de la sede del Movimiento San Isidro en que agentes de la Seguridad del Estado sustrajeron y destruyeron obras del artista.
La CIDH recordó que las demandas de Otero van más allá de la libertad de expresión, pide también el fin del acoso de la Seguridad del Estado, tras sufrir un cerco policial en su barrio, cámara de vigilancia instalada frente a su puerta y cortes de internet en la zona en que reside.
En el comunicado un tema cuidadosamente relatado fue la detención de Otero cuando mantenía una huelga de hambre y sed. El activista había iniciado su protesta pacífica el 25 de abril y el 2 de mayo la Seguridad del Estado irrumpió en su domicilio y lo trasladó al Hospital Universitario General Calixto García, en La Habana.
La institución alerta de que desde el MSI se presentó una acción de hábeas corpus a favor del activista ante el Tribunal Provincial Popular de la Habana, que fue denegada por la Sala Cuarta de lo Penal el pasado 5 de mayo.
En cuanto a la situación de Otero enfatiza que las huelgas de hambre son una forma de protesta social y pacífica. Por esta razón considera que debe garantizarse que acceda a la asistencia sanitaria de manera consentida, sin que medien amenazas, presiones o coacciones por parte del Estado.
Con respecto al periodismo independiente en Cuba señalan que desde febrero de 2021, periodistas y directivos del Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP), han sufrido constantes interrogatorios y amenazas por parte de la Seguridad del Estado.
Advierten que como prueba de esta escalada de violencia en Cuba se documentaron 478 "acciones represivas" en marzo, y 1018 en abril, el peor mes en lo que va de 2021 y también la peor cifra en el último año, según datos del Observatorio Cubanos de los Derechos Humanos.
Además existen al menos 145 personas privadas de libertad y con condenas por cuestiones políticas en Cuba, según los datos de Prisoners Defenders. Desde mayo de 2020, han ingresado 59 nuevas personas en carácter de presos políticos, sin indultos ni rectificaciones de condena en ningún caso.
En el cierre de su comunicado la CIDH señala la existencia de un amplio control estatal sobre las manifestaciones que involucran la participación de disidentes y que estas suelen ser intervenidas y reprimidas con violencia. Las detenciones en este sentido procuran desalentar las protestas críticas contra el gobierno, obstaculizar la libre expresión de las opiniones, impedir la defensa de los derechos fundamentales y el surgimiento de nuevos liderazgos.
La CIDH y sus Relatorías llaman al Estado cubano a reconocer y proteger el derecho a la reunión pacífica y libertad de expresión. Exigen que esto sea sin discriminación por razones de opinión política e insisten en que se debe poner fin en el más breve plazo a la práctica de acoso y hostigamiento de activistas, artistas y periodistas independientes en Cuba.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
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