En el transcurso del actual año, la provincia cubana de Guantánamo solo contabiliza 542 milímetros, el 52 por ciento de la media histórica para los primeros nueve meses del año, debido a la escasez de lluvias en el territorio.
Hasta finales de septiembre, la mayoría de los embalses se mantenían a menos del 50 por ciento de su capacidad de llenado, indicó un reporte de la prensa oficialista local.
Entre las más afectadas, figura la presa “Jaibo”, solo a un 27 por ciento de su posibilidad de acumulado, el nivel más bajo para ella en los últimos años. A pesar de que a inicios de 2021 tributó considerablemente al riego en las áreas agrícolas del valle de Guantánamo, la situación actual la llevó a restringir el suministro de agua.
La “Comandante Faustino Pérez” (La Esperanza), que abastece la mayor parte del municipio cabecera, se encontraba al 34 por ciento, mientras Los Asientos y Pozo Azul estaban al 37 y 15 por ciento de sus capacidades, respectivamente, señala el periódico Venceremos.
La de mejor situación es “La Yaya”, en el municipio de Niceto Pérez, la más grande del Alto oriente cubano, con 160 millones de metros cúbicos de capacidad. Este embalse se encuentra al 53 por ciento, poco más de la mitad de su capacidad.
En septiembre solo se registran 51 milímetros de precipitaciones, el 32 por ciento de la media histórica para ese mes. La ocurrencia de lluvias durante el período mayo-octubre, etapa de tradicional buen comportamiento de las mismas, fue pobre, a excepción de mayo y agosto, con registros superiores a los 100 milímetros.
En mayo, no obstante, se redujo el abasto de agua en la ciudad de Guantánamo debido al déficit de las precipitaciones y sus consecuencias en los niveles de la “Faustino Pérez”, además de inestabilidad en el bombeo desde el río Bano.
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