Activistas cubanos convocaron a una manifestación frente a la Embajada de Cuba en México para protestar contra la política de destierros del régimen en la isla.
“Si tocan a uno, nos tocan a todos. Basta de abusos. Mañana a las 3 p.m. protesta frente a la Embajada de Cuba en México contra la política de destierros del régimen cubano”, convoca en su perfil de Facebook el periodista independiente cubano José Raúl Gallego.
Tras la publicación de la convocatorio, una usuaria comentó que “esta situación hace rato amerita un boicot en las sedes diplomáticas”.
La internauta cubana consideró también que “el alcance extraterritorial de la política discriminatoria y violatoria cubana tiene que acabar”.
La manifestación frente a la sede diplomática de Cuba en la Ciudad de México se realizará luego de conocerse el caso del destierro de la activista cubana Anamely Ramos, quien este miércoles fue impedida de viajar desde Miami a La Habana por orden del régimen, el cual considera que ella no es admisible en su país natal, donde mantiene su única residencia.
Tras conocerse este último destierro a una activista de reconocida trayectoria de oposición al gobierno de la isla, usuarios de las redes, activistas, organizaciones defensoras de derechos humanos y personalidades de la política en Estados Unidos han condenado enérgicamente el desprecio del régimen de los derechos universales establecidos.
“Hoy la artista cubana Anamely Ramos intentó volver a su país. El régimen le ha prohibido ingresar. @hrw_espanol repudia este abuso. Regresar al país de origen es un DD. HH. Cuba es de los cubanos, no del régimen”, aseguró esta jornada Juan Pappier, investigador de la División de las Américas de la organización defensora de derechos humanos Human Rights Watch.
También el Movimiento San Isidro, al cual pertenece Ramos, recordó que la Declaración Universal de los Derechos Humanos para respaldar la libertad de movimiento por el mundo de todas las personas, y exigir el derecho de Anamely de retornar a su país.
"Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado. Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país", apuntó la organización.
Por su parte, la Embajada de Estados Unidos en Cuba arremetió también este miércoles contra el gobierno cubano por “exiliar” a la activista cubana, quien viajó EE. UU desde México en octubre de 2021 para recibir en Washington el Premio Oxi al Coraje 2021, que la Fundación Oxi Day otorgó al artista cubano Luis Manuel Otero Alcántara, líder del MSI, privado de su libertad desde el 11 de julio de 2021.
“¿Qué clase de gobierno no deja que sus ciudadanos regresen a su patria?”, cuestionó la Embajada en sus redes sociales.
En su mensaje, la sede diplomática estadounidense insistió en que el mundo del siglo XXI “debe exigir al régimen que ponga fin a esta cruel política de exilio”.
El abogado cubanoamericano Willy Allen también declaró esta jornada que “es indignante que el gobierno cubano niegue la libre circulación de sus ciudadanos al país donde residen en desprecio de los derechos universales establecidos”.
“Es una aberración gubernamental contra la legalidad”, sostuvo el abogado cubanoamericano.
La miembro del Movimiento San Isidro intentó regresar a su país, donde es residente, pero American Airlines no le permitió abordar, bajo el argumento de que el régimen cubano había dado la orden de no dejarla entrar.
Tras la imposibilidad de viajar a Cuba, la activista cubana tuvo una reunión con representantes del Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) y de American Airlines, en la que le aseguraron que la compañía aérea en ningún caso le dejaría volar a Cuba.
"Existe un protocolo con Cuba y además con todos los países del mundo, donde ellos tienen que acatar lo que dice Cuba en materia de migración, y que si Cuba dice que una persona es inadmisible y no puede entrar al país, ellos tienen que acatar", expuso Ramos al salir de ese encuentro.
Sin embargo, la activista consideró que “la frontera de Cuba no puede estar en el aeropuerto de Miami”, ya que considera que su derecho a regresar a Cuba "es legítimo y justo", pues es un derecho humano, y que todo lo demás, como leyes, reglamentos o protocolos, "deberían ser respetados mientras no violen esos derechos".
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