Las autoridades de la provincia de Las Tunas decidieron priorizar únicamente la distribución de la canasta básica normada y garantizar al menos dos viajes diarios en las principales rutas del transporte masivo de personas, debido al déficit crítico de combustible que afecta el territorio.
Las restricciones de combustible retrasaron las entregas de la Empresa Provincial de Transporte de Pasajeros y Cargas Generales (Cardinal), encargada de distribuir los alimentos que deben colocarse en las bodegas locales para el inicio de las ventas normada a la población a partir del 1 de abril.
Según declaraciones del director de la empresa, Luis Enrique Arias Peña, al Periódico 26, fueron asignadas cantidades limitadas de combustible para avanzar en la colocación de las mercancías en los lugares habituales y poder mantener el servicio de transporte público urbano en cuatro rutas, pero solo con viajes de apertura y cierre y algunos intermedios.
El directivo añadió que “se intensificará el quehacer de los inspectores en las paradas y con los porteadores privados y las mototaxis”. En el caso del transporte hacia el resto de los municipios tuneros operados por Cardinal, el titular agregó que se hará “la apertura y el cierre y se usará la mayor cantidad de porteadores privados, de manera que podamos prestar un servicio mínimo y que la población tenga algunas opciones para el traslado”.
El gobierno cubano sostiene que la carencia de combustible que afecta a las entidades estatales en todo el país se ha visto agravada por las repercusiones del conflicto armado entre Ucrania y Rusia, a lo que suman los supuestos efectos del embargo en la crisis económica interna y la pandemia de la COVID-19.
Desde 2019 los problemas con la disponibilidad de combustible en todo el territorio cubano se han ido acrecentando. En Las Tunas durante septiembre de ese año se redujo el horario laboral y el de clases en las escuelas para ahorrar energía y por las dificultades para trasladarse debido la paralización casi completa del transporte local.
En ese periodo la provincia recibió menos del 30% del combustible planificado, producto de los problemas que tuvo el país para importar combustible.
Casi un año después, y en medio de la pandemia por coronavirus, las autoridades de Las Tunas anunciaron otro severo recorte del transporte estatal en la provincia debido a la falta de combustible, con serias afectaciones para el transporte público urbano, rural e intermunicipal.
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