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La policía registró una guagua en El Vedado este miércoles tras la denuncia de que a una pasajera le habían robado el teléfono celular. Se trata de un hecho inusual que las autoridades acudan a un hurto de esas características.
“Una joven sufrió el robo de su celular, ante lo cual la población detuvo el ómnibus en la céntrica parada de 23 y M. Con todos los pasajeros a bordo, la policía intervino registrando a los sospechosos”, reseñó en Facebook el portal noticioso Qva en directo.
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“El operativo está aún en marcha, aunque varios pasajeros refieren que el celular no debe estar ya en el metrobus”, añade la nota, que no precisó si finalmente fue capturado el presunto responsable del robo.
La publicación tampoco ofreció detalles sobre cómo fue que intervino la policía, si la patrulla estaba por la zona y fue requerida desde el vehículo o si fue llamada expresamente por teléfono para que acudiera al lugar.
Imágenes difundidas en Facebook por el citado portal muestran a una patrulla parqueada junto a un P9 en la calle 23, en las inmediaciones de Coppelia, además de varios policías y pasajeros en la acera.
“En lo que se realiza el operativo varios pasajeros comentan que es muy frecuente sufrir robos en esta y otras rutas, considerando que existe complicidad de algunos conductores”, reseñó la citada publicación.
En los comentarios una internauta se mostró de acuerdo con la presunta complicidad de algunos conductores y relató una experiencia personal al respecto.
“No puede evitar que roben pero si cooperan, cuando el ladrón carterea lo dejan fuera de parada, eso me pasó a mí con uno que intentó cortarme la cadena. Cuando se vio descubierto el chofer le abrió la puerta y cuando bajó la cerró y no paró hasta dos paradas después”, relató la usuaria.
Al cierre de esta nota se desconoce si el presunto ladrón del teléfono celular fue arrestado. No obstante, el hecho marca un precedente en relación con casos similares.
“Donde hay un ladrón hay 20 personas dispuestas a detenerlo. Si nos unimos más y nos apoyamos, podemos luchar contra esos criminales”, reseñó en los comentarios el citado portal informativo.
En los últimos meses aumentaron de forma notable los reportes sobre un incremento de robos violentos en la vía pública, principalmente en La Habana. A ello se suma la actividad de los carteristas, un mal de larga data en el transporte público cubano.
Cada vez son más frecuentes los vídeos o fotos en redes sociales que muestran a ladrones y asaltantes atrapados in fraganti por los ciudadanos, impulsados a tomar esa actitud ante el aumento de delitos y la pasividad de la policía.
En abril, un grupo de vecinos capturó a un hombre que presuntamente arrebató un teléfono celular a una persona que esperaba en una parada de ómnibus cerca de la Virgen del Camino, en el habanero municipio San Miguel del Padrón.
En ese caso, imágenes difundidas en redes sociales mostraron que, tras ser atrapado e inmovilizado con las manos en la espalda, los testigos del incidente optaron por meter al latón en un tanque de basura, se presume que para evitar que pudiera huir.
Previamente, en marzo, otro grupo de vecinos capturó en La Habana a un presunto ladrón que se dedicaba a robar teléfonos celulares en el Reparto Eléctrico, en Arroyo Naranjo.
En redes sociales los cubanos se muestran preocupados por el incremento de los robos y de la violencia en general, y sostienen que las medidas contra hurtos de este tipo no son significativas, lo que favorece que los ladrones reincidan en un plazo de tiempo corto.
También suelen ser frecuentes las críticas al papel de la policía, de la que muchos ciudadanos insisten en apuntar que solo aparece con rapidez en caso de incidentes de tipo político.
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