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El dramaturgo y opositor cubano Yunior García Aguilera salió de Cuba en noviembre de 2021 gracias a las gestiones del grupo religioso los Focolares en un momento en el que se sintió solo y temió por la integridad de su familia.
El activista, que reside en España, contó en exclusiva a la cadena CNN que tomó la decisión cuando el 14 de noviembre, en vísperas de la Marcha Cívica por el Cambio, vio su casa cercada por oficiales de la policía y la Seguridad del Estado.
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“Yo hasta ese día 14 que rodearon mi casa, estaba cerrado, plantado, pero ese día 14 cuando sentí que mi familia estaba corriendo peligro, cuando sentí que ya esa casa no iba a poder ser nunca más un lugar seguro para nosotros y cuando me sentí solo (...) tomé la decisión”, contó el artista.
García Aguilera explicó que durante esas últimas horas en Cuba estuvo incomunicado y aislado, sin saber lo que pasaba o se decía a nivel mediático, sin tener idea de cuántas personas intentaban llegar hasta él, por lo que pensó que, si no se realizaba la protesta el 15 de noviembre, saldría de la isla.
Agregó que esa nunca fue su intención, pues ya había viajado en numerosas ocasiones sin querer quedarse en ningún lugar, pero que la presión sobre su familia ya era demasiado fuerte. “Quizás si 20 o 30 personas hubiesen salido a la calle hubiese sido una marcha frustrada, el problema es que no salió prácticamente nadie y eso implica el temor, el miedo, el terror que generó la dictadura cubana sobre la ciudadanía y al día siguiente, salimos de Cuba”, relató.
En la entrevista con el periodista Camilo Egaña, el dramaturgo cubano comentó que lo más difícil de exiliarse es estar separado de su hijo y no poder explicarle al niño de 11 años el por qué exacto de la distancia. Dijo que teme la imagen negativa que el régimen quiere pintar sobre él y la influencia que eso tenga en el pequeño.
“Cuando pienso en Cuba, en quién más pienso es en mi hijo”, afirmó el artista. “Confío en que es un niño muy inteligente, a pesar de que quizás en la escuela intenten adoctrinarlo, que quizás exista la intención de hacerle creer que su padre es un monstruo o alguien terrible, yo sé que él es mucho más fuerte”, aseguró.
Advirtió también que, en su caso particular, no pensó nunca convertirse en mártir, sino en aportar lo máximo posible a la causa de la libertad de Cuba, para la cual es necesario que la resistencia ponga de lado egos y diferencias. Asimismo señaló que una parte importante de la lucha es lograr el apoyo de la comunidad internacional, para la cual todavía existe un mito sobre lo que sucede en el país porque el régimen ha conseguido engañar “ a una buena parte de la humanidad".
“Ahora mismo tenemos a jóvenes cubanos valiosísimos que están en la cárcel. Qué más quisiera yo que pudieran estar libres y contando sus historias y quitando ese mito que hay sobre Cuba, porque lamentablemente todavía existe en el mundo un mito sobre Cuba que no se ha podido derrumbar”, añadió.
La salida de García Aguilera y su esposa, la productora Dayana Prieto, en noviembre de 2021 conmocionó a la oposición cubana, pues el dramaturgo fue el máximo instigador de la marcha por el cambio que convocó la Plataforma Archipiélago de la que también era líder.
Al conocer la noticia, la propia organización publicó un breve comunicado en el que manifestó estar ajena a ese acontecimiento. Mientras, el artista cubano decidió solicitar asilo político en España pues, de regresar a la isla, sería detenido por las autoridades e iría preso.
A los pocos días de su llegada a la península ibérica mandó un escueto mensaje a sus amigos y seguidores confirmando que él y su esposa se encontraban bien. "Muchas gracias a todos los amigos que se han preocupado por nosotros. Llegamos a España, vivos, sanos y con las ideas intactas", indicó el activista en una publicación de Facebook.
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