Activistas de la sociedad civil cubana en el exilio convocaron a celebrar una marcha en Toronto, Canadá, en recuerdo del primer aniversario de las manifestaciones que tomaron las calles durante las históricas protestas del 11 de julio en Cuba.
“Marcha por el primer aniversario del 11J. Acá en Toronto marcharemos el 10 de Julio por la libertad para los presos políticos y cada uno representará a un preso político”, anunció vía Twitter la activista cubana Ismary Bacallao.
La convocatoria fue acompañada de un video en el que la activista se solidarizó con la situación del rapero cubano Carlos Ernesto Díaz González, identificado en redes sociales como Ktivo Disidente, quien se encuentra en prisión desde que protestó a finales de abril en el Boulevard de Sant Rafael, en La Habana.
"El que es comunista que lo sea, pero el que no, hay que respetárselo”, dijo el rapero encaramado en un muro junto a un parque infantil en el céntrico Boulevard. "Libertad para el pueblo cubano, excarcelación de todos los presos políticos: ¡1,124 presos políticos! Yo voy a ser el 1,125", dijo Díaz González mientras era escuchado y filmado por un grupo de personas.
En un gesto de protesta que recordó al protagonizado por el joven cubano Luis Robles Elizástegui en la misma calle habanera, el rapero pidió el fin de la represión en Cuba y la liberación de todos los prisioneros de conciencia del régimen cubano.
“Esto tiene que parar, tiene que parar y lo tenemos que parar nosotros, con civismo, la sociedad civil. No tiene que haber violencia. No tiene que haber derramiento de sangre, pero tienen que dejarnos participar en la vida política del país”, reclamó Ktivo Disidente.
"Esto va a seguir siendo así hasta que no los pongamos como nos tenemos que poner y exigir lo que tenemos que exigir, porque nos toca, porque tenemos derecho a tener derechos", añadió el activista.
Antes de lanzarse a la calle a protestar pacíficamente, el rapero dijo en sus redes sociales que "sin la crucial ola libertaria no seríamos más que nuevas víctimas de estos verdugos que a toda costa intentaran criminalizar y manipular ante la opinión pública las razones legítimas de nuestra lucha social”
“No se amedrenten. Si ya tienen mil inocentes presos, démosles cinco mil más", llamó Ktivo Disidente a perder el miedo a la represión y a promover la manifestación pacífica como forma de protesta contra el régimen y reclamo de un cambio en Cuba.
El valiente gesto cívico del cubano le valió su inmediata detención por parte de los represores de la Seguridad del Estado y su desaparición por unas horas, que fue denunciada en redes sociales como “paradero desconocido” tras una “detención arbitraria”.
"Ktivo Disidente es el valiente que protestó esta mañana en el Boulevard de San Rafael exigiendo libertad para los presos políticos y participación de todos los cubanos en la vida política del país. En estos momentos no se sabe nada de él. En el video se vio cómo un agente de la Seguridad del Estado vestido de civil manda a los que grababan a que apaguen sus celulares y a que 'montaran en la patrulla' al que 'se pusiera pesado'", explicó la joven influencer Saily González.
Por su parte, el villaclareño Pedro López, familiar del preso político del 11 de julio Andy García Lorenzo, también cuestionó la detención del opositor y recordó que este no vandalizó, ni agredió a la "sagradas y siempre correctas fuerzas del "orden" en Cuba", al tiempo que pidió su liberación inmediata. "Lo que hizo es completamente legal, amparado en la Constitución de ustedes, no la mía, y que aun así violan impunemente. LIBERTAD YA", exigió.
Los activistas cubanos por la democracia y los derechos humanos exiliados en Canadá son uno de los grupos de la sociedad civil más activos en los últimos tiempos. Sus denuncias de los negocios de empresas de este país en Cuba, la venta de productos de empresas controladas por los militares del régimen o de la promoción oficial del turismo en Cuba han alcanzado una gran visibilidad e impacto.
En una de sus acciones más recientes, a finales de marzo, los activistas demandaron que la compañía Sherritt cancele sus negocios con el régimen, en medio de una creciente movilización de la sociedad civil cubana para exigir a los empresarios extranjeros no ser cómplices de la dictadura militar de partido único que reprime y hambrea al pueblo de Cuba.
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