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El preso político Yosvani Rosell García Caso se encuentra "plantado" tras ser golpeado por los responsables de la prisión de Holguín y puesto en una celda de castigo, contó a CiberCuba su esposa.
Mailín Rodríguez Sánchez, cónyuge del manifestante del 11J, fue a visitarlo el pasado jueves, pero no autorizaron el encuentro y conoció que continuaba en una celda de castigo, aislado del resto de los reos.
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"No creo nada de lo que me dijeron", dijo la cubana a través de un mensaje de voz.
El prisionero fue golpeado y detenido el lunes pasado, cuando se cumplió el primer aniversario de las protestas pacíficas del 11J y este decidió vestirse de blanco en la cárcel.
"No me dejaron verlo porque se encontraba en huelga", explicó la mujer, que conoció a través de los familiares de otros presos que el castigo de su esposo sería solo por tres días, sin embargo continuaba en aislamiento sin justificación.
Asimismo, pudo confirmar que García Caso fue golpeado por los encargados de la cárcel.
"Siguen cometiendo injusticias en las prisiones con los manifestantes del 11J. Se están pasado los dictadores de Cuba y abusan con los muchachos. Pido libertad y justicia", finalizó.
Yosvani Rosell García Caso fue sentenciado a 15 años de privación de libertad por cometer el delito de sedición. Es padre de tres hijos y en reiteradas ocasiones ha confesado que no se arrepiente de haber protestado ese día en contra del gobierno.
"¿Cómo podría arrepentirme de querer ver a mi país libre de una dictadura comunista, que nos tiene sumergidos por más de 60 años en extrema miseria, y violando todos nuestros derechos humanos? Ese bendito 11 de julio no sólo marcó un antes y un después del inicio del fin del comunismo en Cuba, también nos mostró el peor rostro de la dictadura", dijo a través de una carta en marzo pasado.
Tampoco es la primera vez que protagoniza una huelga en contra de las injusticias que se cometen en su contra dentro de la cárcel de Holguín.
A inicios de año estuvo unos 17 días en huelga de hambre "por encontrarse en desacuerdo con la alta petición fiscal" de 30 años de privación de libertad, por su participación en las protestas del 11J.
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