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El aumento de los salideros de aguas albañales en espacios públicos contribuyen a que en los últimos meses haya empeorado la situación epidemiológica en Santiago de Cuba, particularmente con el crecimiento de los casos de dengue.
Una de las averías más significativas se encuentra en el Callejón de camino de la isla, en el Reparto Marimón de la ciudad cabecera. Denuncias realizadas por los vecinos a través de la página en Facebook El Chago, refieren al respecto que “la mitad de la cuadra está llena de aguas albañales, reventando en el frente de varias viviendas” y que la situación ya fue reportada a las empresas implicadas, pero aún no reciben respuesta, en tanto los niños juegan en zonas cercanas y se exponen al peligro del dengue.
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Este perfil reflejó además datos oficiales correspondientes a julio pasado, compartidos por la doctora Madelaine Rivera Sánchez, directora nacional de Vigilancia y Lucha Antivectorial del Ministerio de Salud Pública, según los cuales la incidencia de la enfermedad ascendía al 13%. El virus causó incluso el deceso de la niña Arlín Sailet Acuña Espinosa, residente en el municipio de Contramaestre.
Asimismo emplazó a las autoridades locales para que ofrezcan una solución a los puntos de concentración de aguas albañales y salideros, convertidos ya en focos del mosquito aedes aegypti.
Por su parte el medio oficialista Cubadebate subrayó que en este 2022 se reporta la mayor cantidad de focos del peligroso vector de los últimos 15 años, con un crecimiento del 21.7% en comparación con similar etapa de 2021. Las peores tasas de contagios se encuentran precisamente en La Habana, Holguín y Santiago de Cuba.
La presencia de salideros y vertederos en las vías públicas también agravan la situación epidemiológica de Cienfuegos, complicada además por la carencia de recursos para fumigar y combatir al vector transmisor del dengue, que en esa provincia ha causado varias muertes, incluidos dos menores de edad.
En agosto solo se llegó a un 60 % del territorio fumigado en la ciudad cabecera, por lo que, en medio de esa crisis, las autoridades recomendaron a la población tomar sus propias medidas de prevención para evitar que aumente el riesgo de infestación.
“El efecto de acciones sanitarias como la pesquisa o la ampliación de capacidades hospitalarias para la atención de enfermos, puede debilitarse si no se acompaña de chapeas sistemáticas, eliminar salideros, recoger micro vertederos espontáneos o asfaltar, rellenar o subsanar baches —tan comunes— que acumulan agua”, informó el periódico local 5 de Septiembre.
También se agrava la situación del dengue en Isla de la Juventud, donde a finales de agosto pasado se habían reportado más de mil personas con dengue, dos de las cuales permanecían este sábado en estado crítico. Las zonas más afectadas son los Consejos Populares de Pueblo Nuevo, Abel Santamaría, 26 de Julio y Micro-70.
A mediados del mes anterior el gobierno del país reconoció que en 13 provincias y el propio municipio especial presentaban incrementos en la tasa de incidencia del virus portado por el mosquito aedes aegypti.
Las autoridades se limitaron a pedir "mayor acción, responsabilidad y compromiso" al pueblo, a las instituciones y al personal que interviene en la campaña antivectorial porque en el país no hay medicamentos, ni recursos para hacer frente al aumento de casos de esta enfermedad.
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