Las autoridades cubana quitaron el derecho a llamadas telefónicas al preso político Roberto Pérez Fonseca y lo mantienen en celda de castigo.
"Mi hermano el preso político Roberto Pérez Fonseca sigue en la celda de castigo, con las esposas chaquiras puestas y ahora también le quitaron las llamadas telefónicas. Aunque son solo 3 minutos por semana, ese es su único momento de saber de mi madre y su niño de 2 añitos", denunció el activista Albert Ortega Fonseca en Twitter.
Roberto Pérez Fonseca fue uno de los miles de cubanos que se manifestó el 11J. Estuvo en las protestas en San José de las Lajas. El 16 de julio de 2021 fue detenido por la policía y la fiscalía pidió para él 12 años de privación de libertad como sanción conjunta y única por los cargos de desacato, atentado, instigación a delinquir y desórdenes públicos.
Tras el juicio fue condenado a 10 años de cárcel porque las autoridades cubanas consideraron que era un líder en la protesta en su zona y por romper un cuadro de Fidel Castro en la calle cuando se manifestaba.
Su familia lucha por visibilizar la represión en Cuba, exige continuamente al Estado cubano y a organizaciones internacionales que se respeten los derechos humanos y que liberen a los presos políticos.
En agosto Lisset Fonseca, madre de Roberto y Albert, estuvo entre los familiares de presos políticos que la policía cubana detuvo por manifestarse pacíficamente en la Plaza de la Catedral de La Habana.
En junio la madre cubana fue imposibilitada de viajar a Europa donde debían reunirse con organismos internacionales como el Parlamento Europeo y el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, para exigir la libertad de su hijo y de otros presos políticos.
A principios de este año Roberto Pérez Fonseca estuvo plantado en prisión tras participar en una trifulca junto a otros detenidos contra los guardias de la cárcel. Aseguró que no cantaría canciones comunistas, ni participaría en actividades reeducativa del centro de detención.
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