El exespía cubano Gerardo Hernández Nordelo entregó el Premio del Barrio de los CDR a miembros del Tribunal de Diez de Octubre, en La Habana, donde este año fueron condenados varios manifestantes del 11J, así como el influencer El Gato de Cuba.
El actual coordinador de la organización reconoció este jueves al tribunal por su "colaboración con la comunidad" y por "cumplir con firmeza" la misión de impartir justicia.
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"El premio enaltece la valentía y entrega de sus profesionales en los actos judiciales que se derivaron de los hechos vandálicos del 11 de julio de 2021", expresó un reportaje de la televisión estatal.
La presidenta del tribunal, Kenia Reyes Lara, agradeció en nombre del colectivo la distinción, que reconoce a personas, colectivos, familias y escuelas que trabajan en función de las personas de su comunidad.
Este tribunal de Diez de Octubre fue el que sentenció en abril al influencer Yoandi Montiel Hernández, conocido como "El Gato de Cuba", a dos años de prisión por un delito de desacato agravado.
"La Fiscalía le pedía cinco años de privación de libertad, y los abogados y la Fiscalía llegaron a un arreglo y le echaron dos años de privación de libertad", dijo entonces un amigo identificado como Osmay.
Esta sala también condenó en julio a la estudiante Gabriela Zequeira Hernández, de 17 años, a ocho meses de cárcel por su participación en el 11J, bajo el cargo de desorden público.
Según denunció su madre, el arresto corrió a cargo de las tropas élites conocidas como "avispas negras", que sometieron violentamente a la joven, le tiraron del pelo y la introdujeron por la fuerza dentro de un vehículo junto a otros detenidos.
Fue este tribunal el que sirvió de sede a principios de año al juicio en el que fueron juzgados y sentenciados más de 30 participantes en las protestas del 11J, incluidos varios menores de edad, por el delito de sedición.
Durante los dos días que duró la vista oral, las inmediaciones del local estuvieron militarizadas, especialmente en el momento de la salida de los manifestantes. Solo se dejó entrar a un familiar para acompañar a los encausados.
Según la activista Saily González Velázquez, policías y agentes de la Seguridad del Estado impidieron a los familiares de los imputados acercarse a la cerca perimetral del tribunal.
"Cerca de 20 policías no solo impedían el paso a los familiares hacia el camión que transportaría a los manifestantes en detención, sino también la vista hacia ellos. Al menos una docena de agentes de la Seguridad del Estado rondaron a los familiares que permanecían a la espera", detalló.
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