La Seguridad del Estado chantajeó a la madre de la abogada cubana Laritza Diversent y le dijo que si esta cesaba su activismo, le permitirían tener acceso a un tratamiento médico para su pierna izquierda e incluso permitirían el reencuentro entre ambas.
Maricelis Cámbara sufrió cuando niña un accidente que le afectó la movilidad de una de sus piernas, pero dos oficiales de la Seguridad del Estado le dijeron que en sus manos estaba la posibilidad de gestionarle una cirugía y evitarle los dolores que sufre.
“Esto me convence de que hay que seguir haciendo el trabajo porque algo hacemos bien. Si no les preocupara Cubalex no acosarían una mujer con discapacidad, de 63 años”, dijo la jurista a CubaNet.
Asimismo, la directora de Cubalex confesó que el la organización trasciende a toda persona y el trabajo que realiza su equipo continuará, a pesar de todas las presiones que pueda ejercer La Habana.
“Si yo mañana renuncio para que dejen a mi mamá en paz, Cubalex va a seguir existiendo y trabajando, que es lo que Cuba necesita”, enfatizó.
Diversent aseguró no está dispuesta a negociar nada con el régimen cubano y denunció que los mismos que la obligaron en 2017 a exiliarse en Estados Unidos por su trabajo en defensa de los derechos humanos son quienes pretenden presionar a su anciana madre para que se aparte del activismo.
Esta no es la primera vez que la Seguridad del Estado intenta amenazar a la señora; en agosto de 2021 otros dos oficiales de la contrainteligencia la amenazaron con juzgarla por las actividades de su hija.
Las amenazas incluyeron la posibilidad de secuestrar a Diversent en Estados Unidos u otro país y llevarla a Cuba para ser juzgada.
En ese entonces la madre de Cámbara se encontraba convaleciente y ahora se aprovechan nuevamente de su vulnerabilidad, porque un hermano debutó con demencia.
"Está de más aclarar que no voy a usar mi posición de liderazgo para hacer retroceder la organización por chantajes”, finalizó Diversent.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: