El gobernante Miguel Díaz-Canel llamó a los dirigentes y trabajadores del sector de la construcción a “edificar con belleza y armonía” en Cuba.
Presente en la reunión de balance anual del ministerio de la Construcción (MICONS), junto al primer ministro Manuel Marrero Cruz (inaugurador de peceras) y el comandante Ramiro Valdés Menéndez (contable nacional del cemento y la cabilla), el también primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) expresó su penúltima ingenuidad sin rubor alguno.
“Convocó a los constructores del país a edificar con calidad”, resaltó un reporte del Noticiero Nacional de Televisión (NTV), en el que no aparecieron más que las caras de los dirigentes y las sumisas e idolátricas intervenciones de los directivos del MICONS.
Según el NTV, Marrero Cruz llamó a revolucionar la industria local de materiales de la construcción y convocó a la solución del problema en los municipios. Se trata de una “política de descentralización” que lleva adelante el régimen cubano, que mantiene el control central de los recursos, pero traslada la responsabilidad de una gestión eficiente a las entidades locales, empobrecidas y descapitalizadas por el propio régimen.
“¿Qué dijimos en la Asamblea al final? Los recursos más seguros con los que podamos disponer son los que seamos capaces de producir. Y en este asunto de la vivienda, la solución más segura que tenemos es la que se logra ahí abajo en el municipio”, dijo el primer ministro.
Por su parte, Díaz-Canel reconoció “la insatisfacción que provoca el tema [de la construcción] en el pueblo”. En ese contexto, llamó a solucionar el problema de la vivienda que aqueja hace décadas a la población cubana. Pero insistió en solucionarlo con “calidad”.
“El tema no es sólo construir vivienda y otorgarla. Si a uno le dan una vivienda mal construida, de esas que a los tres meses se le empieza a caer el repello, la ventana se pudre o se le zafan las tablillas, o se filtra… lo que le creamos es más problema”, señaló el gobernante.
En ese sentido, llamó a “tener control de la calidad y que los recursos que tenemos disponibles para la vivienda se empleen bien, y hagamos las viviendas con calidad”.
“Estamos en un sector muy revolucionario, pero además de revolucionario, presidente, comandante, muy humilde y con la convicción -y dije que no me quería emocionar- de que el socialismo es el único que nos va a dar la posibilidad de salir de toda esa situación, de que es el Partido el que seguirá siendo el rector de nuestra sociedad, con esa clase obrera en el poder; y esa historia [señalando a Valdéz Menéndez] que vemos ahí reflejada en la continuidad de ustedes”, expresó conmovido Misael Rodríguez Llanes, secretario General del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Construcción.
Nada dijo el cucarachero de la Televisión Cubana del precio del cemento que pagan los cubanos (más de 2,000 CUP por saco, en un país con el salario mínimo fijado en 2,100 CUP). No mencionó tampoco cómo se derrumban las famosas “escuelas vocacionales” mientras mueren cubanos intentando sacar de ellas cabillas y otros materiales de construcción.
El reporte de la prensa oficialista no aludió al deterioro de la mayoría de la infraestructura pública construida por la llamada “revolución”, ni ofreció datos del déficit habitacional del país, o los constantes derrumbes que ocurren en Centro Habana y otras localidades mientras en el Vedado y toda la Isla se levantan descomunales hoteles.
Pero no faltó el mensaje de que "el socialismo es el único que nos va a dar la posibilidad de salir de toda esa situación". Atento a lo que se dice: algo parecido dijo el defenestrado ministro de Economía, Alejandro Gil Fernández, del que no se sabe a que "otras tareas" fue destinado para "seguir haciendo por Cuba".
¿Qué opinas?
VER COMENTARIOS (9)Archivado en: