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La repatriación de los restos mortales de cubanos fallecidos en Estados Unidos ha sido un tema recurrente en los últimos años entre familias que desean que sus seres queridos sean retornados a su país de origen.
La reciente muerte del reguetonero cubano El Taiger y el inminente envío de sus restos a Cuba ha puesto nuevamente el tema sobre la mesa.
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Un reciente reportaje del periodista de Telemundo 51, Yuniesky Ramírez, ha dado respuesta a algunas dudas recurrentes.
La repatriación de restos, ya sea hacia Cuba o hacia cualquier parte del mundo no son tan complicados como algunos creen, según reveló al citado medio Marité Torres, directora de la funeraria Van Orsdel, de Kendall.
El proceso suele tardar aproximadamente una semana, aunque en el caso de Cuba el tiempo puede ser mayor y puede demorar hasta dos semanas.
"Entre la obtención de firmas, la traducción de documentos al español, su envío al consulado en Washington y la recepción del permiso, ya estamos listos para el vuelo" explicó Torres.
Para trasladar un cuerpo por vía aérea solo se requiere el certificado de defunción.
La funeraria elegida se encargará de todos los trámites necesarios restantes para la repatriación.
El servicio tiene un costo de entre 6,800 y 7,000 dólares para Cuba.
Una vez en La Habana, los restos mortales serán entregados exclusivamente en la funeraria de Calzada y K, en el habanero municipio Plaza de la Revolución.
El traslado de cenizas es más sencillo y no requiere tantos trámites como el de un cuerpo, pues los familiares pueden encargarse personalmente de llevar las cenizas.
“Con el permiso de cremación y el certificado de defunción, se pueden llevar las cenizas en el avión sin complicaciones”, señaló Marité Torres.
Torres también destacó que no es obligatorio que sea un familiar directo quien solicite la repatriación.
“Si es la persona más cercana, puede hacer los arreglos para enviar los restos a Cuba”, comentó.
A pesar de lo que pueda parecer, la repatriación de restos mortales de un país a otro es un proceso cada vez más accesible, facilitado por funerarias especializadas que permiten cumplir con los deseos de quienes desean descansar en su tierra de origen.
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