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El diario oficialista Escambray ha arremetido este jueves contra el supermercado de 3ra y 70, en Playa (La Habana), y contra el silencio oficial que rodea la implantación de la venta de sus productos en dólares y en efectivo. "Muchos oídos del pueblo esperan explicaciones", señala la periodista de Deportes Elsa Ramos, Premio Nacional Juan Gualberto Gómez en los años 2014, 2018 y 2019.
En un artículo titulado "Dolarización parcial en Cuba: ¿los candados del silencio?", Ramos critica "los vacíos informativos", que rodean una "apertura (la de 3ra y 70), que llegó de sopetón" y que ha convertido el debate en redes sobre la venta en dólares en un "escozor al rojo vivo", por los traumas que arrastran los cubanos de la Isla (el resto de cubanos son "enemigos") con el uso de la moneda de Estados Unidos y porque esta tienda, aunque no ha creado las diferencias sociales que existen a día de hoy en Cuba, las visibiliza más.
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Según apunta la periodista, los dólares con que se pagan las compras en 3ra y 70 "son otra cosa", muy diferente al CUC y al MLC (monedas con las que no se abonaron la mayoría de salarios en Cuba). Ella cita, además, al "controvertido CL que tiene enloquecidos a empresas estatales y productores agrícolas", en referencia a la Capacidad de Liquidez para Pago al Exterior. Estos "candados del silencio", insiste, han tenido consecuencias en las calles, "donde se augura al muerte gradual del MLC" y, como es natural, ha influido en su cotización informal.
Dicho esto, Ramos añade que para quienes como ella a estas alturas continúan apoyando el régimen de Díaz-Canel no se trata de demonizar el USD si en el mejor de los casos la tienda en dólares sirviera para surtir las bodegas destruidas de los barrios o para vender en algún comercio estatal, en moneda nacional, un paquete de pollo, leche en polvo o una jeringuilla con la que hacerse un análisis de sangre. Sin embargo, recuerda que cuando abrieron las tiendas en MLC se dijo que lo recaudado se usaría para abastecer el resto de comercios y eso nunca ocurrió. Ahora, supone que la nueva tienda en dólares de 3ra y 70 llega con la misma promesa. Lo que es seguro es que lo hace con el agravante de que el vuelto lo dan en caramelos, algo que a ella le parece "una soberana estafa al consumidor".
"Quienes no pueden ni asomarse a 3ra y 70 son, lamentablemente, los mismos que nunca o casi nunca pudieron cambiar sus pesos por CUC, aunque aquel costaba 25 en una proporción de cambio similar a la de ahora; son los mismos que nunca han entrado a una tienda en MLC porque mucho menos pueden acceder al trueque de 1 por 250, 270 pesos o más; son los mismos que dejaron en la tienda de comercio una libra de arroz vendida a precio diferenciado por solo disponer de una exigua chequera que los convierte en vulnerables, los registrados por el Ministerio de Trabajo, porque ciertamente por la inflación, la escasez y los cambios monetarios de los últimos tiempos, en la práctica muchos cubanos, cuyos salarios son incapaces de respaldarles una solvencia mínima, podrían sumarse a ese ejército".
El artículo de Escambray se refiere, sobre todo, al silencio informativo y por eso se pregunta si el régimen tiene previsto abrir más supermercados como el de 3ra y 70 en la capital de Sancti Spíritus y en Trinidad, de la noche a la mañana, sin dar explicaciones previas. "Un dólar más, a pesar de la falta que nos hace, no puede dejarnos un país de menos", concluyó.
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