El político español José Carlos Mauricio (ex portavoz del partido Coalición Canaria y ex dirigente del Partido Comunista) ha sido condenado a un año y tres meses de cárcel por haberse prestado a fingir que una ciudadana cubana trabajaba para él, con el fin de que la mujer pudiera regularizar sus papeles.
La sentencia ha sido dictada después de que los otros dos acusados en el proceso, Juan Manuel Benítez (decano de la Facultad de Economía de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria) y su pareja, la ciudadana cubana Mayra Despaigne Díaz, reconocieran durante el juicio que habían presentado documentos falsos con la ayuda de su amigo Mauricio.
El Juzgado de lo Penal número 2 de las Palmas de Gran Canaria ha considerado probado que el ex diputado nacionalista firmó en el año 2014 un contrato simulado que acreditaba que Despaigne trabajaba para la Fundación Centro de Estudios Canarios, cuando tal empleo no existía.
Todo ello cuando la supuesta empleada no trabajaba realmente en esa entidad ni cobraba nada allí y era su pareja, Juan Manuel Domínguez, quien pagaba las cuotas a la Seguridad Social.
Aunque la jueza ha considerado que la pareja cometió el mismo delito de falsedad en documento oficial que cometió Mauricio, les ha impuesto una pena más leve, de solo seis meses de cárcel.
La sentencia ha reiterado, además, que falsearon los documentos que acreditaban que Despaigne llevaba residiendo más de tres años en España, cuando la realidad es que la ciudadana cubana regresaba cada tres meses a la Isla, cada vez que expiraba su visado de salida porque "así se exigía por las autoridades de ese país".
El ex portavoz de Coalición Canaría admitió en el juicio que contrató a Despaigne para el Centro de Estudios Canarios "por motivos 'humanitarios', para evitar que fuera 'despedida'" de Canarias"; es decir, "para hacerle un favor" a su amigo.
La cubana llegó a ser sometida a vigilancia por parte de la policía tras las sospechas que habían suscitado los documentos de su regularización.
La jueza ha indicado que José Carlos Mauricio se contradijo en el juicio en detalles tan simples como cuál era la sede donde trabajaba su supuesta empleada o cuál el salario que le pagaba. A ello se suma que ni tan siquiera negó que fuera el compañero sentimental de Despaigne quien pagase las cuotas sociales.
La agencia Efe destaca este jueves que el Centro de Estudios Canarios no tenía empleados desde hacía años porque había despedido a sus dos anteriores trabajadores por falta de recursos para pagarles.
Además de las penas de prisión para el político español, se han impuesto multas de 1.800 euros a Benítez y Despaigne, y de 2.400 euros a Mauricio.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: