La Seguridad del Estado ha puesto en libertad al expreso político cubano Ariel Arzuaga Peña, quien fue deportado por Panamá a principios de mes y, al llegar a la Isla, volvió a ser encarcelado por un supuesto delito de “amenaza”, informó Martí Noticias.
Después de regresar a su país, el miembro del movimiento opositor UNPACU fue redirigido el martes a la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores en La Habana, donde la policía política lo detuvo y le decomisó sus documentos de identidad.
Arzuaga, quien había pasado cinco años en prisión por delitos presuntamente fabricados, vendió todas sus pertenencias para salir del país en 2015. El opositor viajó a Guyana y luego a Brasil, Colombia y Panamá, donde fue retenido por autoridades migratorias debido a su condición irregular.
“Yo lo vendí todo (…) no tengo casa, no tengo nada. Estoy a la merced de lo que ellos quieran hacer conmigo”, manifestó el activista, quien una vez en la capital pasó cuatro días en huelga de hambre para exigir su liberación de Villa Marista.
La Seguridad del Estado no solo lo deportó de La Habana a Bayamo, donde radicaba, sino que también le decomisó el pasaporte y su carnet de identidad.
El opositor llegó a Cuba el pasado 11 de octubre, y asegura que desde entonces las amenazas de la policía política han sido constantes. Su esposa Yaquelín García denunció que el mismo día de su arribo fue interrogado, amenazado y le avisaron con antelación que iba a ir a prisión.
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