Las autoridades cubanas impidieron al periodista independiente Boris González Arenas viajar a Gran Bretaña esta semana.
"No permiten que los activistas cubanos abandonen el país por un tiempo para dar un discurso, para trabajar con organizaciones en otros países", denunció el opositor al diario británico Express.
"En los últimos meses ha sucedido más. Tal vez tenemos 100 o 200 activistas que no pueden viajar en este momento", lamentó.
González había sido invitado por un grupo parlamentario para hablar sobre la situación en Cuba.
"En mi caso ahora no puedo abandonar el país porque estoy en una lista. Te detienen durante el viaje al aeropuerto, te encarcelan durante 10-20 horas y luego te liberan. Eso me ha sucedido a mí y a muchos activistas de la oposición en Cuba", relató.
El periodista detalló que todavía no conoce la razón oficial que le ha impedido desplazarse a suelo británico.
También reveló algunos detalles del hostigamiento que ha sufrido por parte del régimen de la Isla. "He estado en la cárcel, me han despedido de mi trabajo, la policía me sigue en la calle", afirmó.
"Es muy difícil. Es muy duro. Tengo dos hijos, una esposa. Todos hemos sufrido algún tipo de intimidación. Mi hijo es un niño de diez años, y me ha visto estar dos veces detenido por la policía durante 24-30 horas. Ha pasado muchas veces y, por supuesto, mis hijos han sufrido", agregó al citado medio.
"Como activista de la oposición, tengo que pensar siempre en las consecuencias para mi familia, mis amigos", subrayó.
La prohibición de viajar fue condenada por diversos agentes políticos de Gran Bretaña. En opinión del parlamentario conservador David Davies, la decisión de las autoridades cubanas "demuestra su desprecio por las libertades básicas".
También la oficina de asuntos exteriores de la Commonwealth expresó su decepción por la actitud del régimen de la Isla y ratificó su oposición a la censura de periodistas y defensores de los derechos humanos.
La Asociación Pro Libertad de Prensa (APLP) denunció que el pasado mes de agosto 13 periodistas independientes cubanos sufrieron diversos tipos de agresiones.
Por su parte, González ya sufrió esta misma arbitrariedad en junio, cuando no pudo viajar a Panamá porque las autoridades bloquearon su salida en el mismo Aeropuerto José Martí, para impedirle participar en un evento de la Mesa de Unidad de Acción Democrática (MUAD).
El activista fue uno de los arrestados durante la marcha organizada por la comunidad LGBTI+ el pasado 11 de mayo.
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